14º.- RETENIDOS POR LA METEOROLOGIA EN NUEVA ZELANDA
Como consecuencia de la rotura de la vela génova y la correspondiente recalada en Opua (al norte de Nueva Zelanda) para reparar, se nos fue una de las mejores oportunidades meteorológicas que se han dado hasta la fecha para realizar la travesía hasta el archipiélago de la Fiji. Y desde esa fecha seguimos esperando una “ventana” meteo adecuada para realizar con seguridad las 1100 millas que nos separan de las nuevas islas. La meteorología por este lugar del mundo es muy compleja y máxime cuando estamos metidos ya en pleno invierno austral.
En la imagen que sigue tenéis marcado el lugar donde se encuentra Opua (situación actual del Tin Tin) y Fiji. Podéis observar también que un gran anticiclón se sitúa al sur de Australia y con una presión cercana a los 1030 milibares y una cuña orientada hacia el Este, promete un futuro periodo de buen tiempo para realizar la travesía entre Nueva Zelanda (Opua) y Fiji.
En la siguiente imagen podéis observar como el anticiclón se ha desplazado hacia el Este como estaba previsto, pero una cuña de bajas presiones se está originando sobre los 30º de latitud, al sur de la isla de Nueva Caledonia (la isla de forma alargada) como consecuencia de la irrupción de una masa de aire cálida proveniente de la zona tropical.
Y en la imagen siguiente se puede observar la formación de una baja presión, perfectamente organizada, en la parte Norte de Nueva Zelanda, la cual producirá una profunda inestabilidad en todo el área.
Esta situación meteorológica que os exponemos aquí, se podría decir que es una evolución estándar de los patrones del tiempo en ésta época del año y que con mas velocidad o con menos se va produciendo de manera periódica. La travesía hasta Fiji durará unos 7/8 días aproximadamente y por lo tanto hay que calcular muy bien cuando es el momento de zarpar para situarse al Norte de la borrasca cuando ésta se sitúe sobre Nueva Zelanda y favorecerse de los vientos de componente oeste que producirá (recordar que en el hemisferio Sur los vientos rotan en el sentido de las agujas del reloj en las bajas presiones)
Pero esas bajas presiones (que varían de intensidad en consonancia con la diferencia de temperatura de las masas de aire, y no es extraño vientos superiores a los 40 nudos) pueden tener una trayectoria mas Norte, o sea, pasar mas al Norte de Nueva Zelanda y por lo tanto interceptar nuestra posición una vez hayamos salido rumbo a Fiji. Los vientos que se pueden soportar en estas condiciones pueden llegar a ser importantes, pero lo mas inquietante es la altura de las olas que se suelen llegar a alcanzar, no siendo extraño alturas que rondan los 6 metros como consecuencia del enorme “fetch” existente en el Pacífico Sur (la altura de las olas es directamente proporcional a la distancia en millas en la cual un viento sopla con intensidad en una misma dirección, llamado: fetch)
La siguiente fotografía está sacada hace muy poco y fue en el transcurso de la última borrasca que visitó la parte Norte de Nueva Zelanda, la cual nos brindó tres días en las condiciones que podéis apreciar en la imagen
Y como consecuencia de estas características que os estamos comentando, seguimos en Opua a la espera de que se den unas condiciones adecuadas para poder zarpar. Realizamos diariamente un profundo estudio de todos los parámetros meteorológicos a través de varios tipos de información, tratando de prever cual podrá ser el momento mas adecuado para volver a retomar nuestras singladuras. De momento disfrutamos del paraje donde estamos, la localidad de Opua, viviendo una calma tensa y con el Tin Tin listo para largar amarras en cualquier momento.
A través de las fotografías que siguen os podéis hacer una idea del entorno paisajista que nos rodea. Enmarcado en un área que se denomina Bahía de las Islas donde existen multitud de fondeos protegidos y están ubicadas varias localidades con importantes instalaciones náuticas.
Nuestra estancia oficial en Nueva Zelanda ha sido de 7 meses, y durante éste tiempo hemos podido disfrutar de un maravilloso país tanto por sus paisajes, que nos han recordado siempre a nuestra entrañable Asturias, como por su paisanaje que nos ha acogido de manera fraternal.
Pero ya va siendo el momento de abandonar la tierra de los kiwis y aproar hacia otros horizontes. Esperamos que en breve se den las circunstancias meteorológicas adecuadas que nos posibiliten volver a navegar por estas complicas y fascinantes aguas que componen el Pacífico Sur.
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