De la isla de Phuket (Tailandia) a Langkawi (Malasia)
Langkawi
1º
05 DE DICIEMBRE 2015
NUEVA TEMPORADA DE NAVEGACIÓN
De nuevo activamos este blog especial con el fin de que puedas seguirnos en la temporada de navegación 2015 / 2016 que en breve dará comienzo. Las imágenes previas a los textos y que encabezan este blog, corresponden a las áreas geográficas por las que navegaremos: las aguas de Tailandia, Mar de Andaman y Malasia. Los reportajes que iremos enviando a este blog, y que subirán de forma automática, se gestionan a través del sistema estadounidense Sailmail al que accederemos a través de la emisora de larga distancia onda media/onda corta. Este sistema sólo nos permite enviar texto como el presente y será cuando dispongamos de conexión a Internet cuando actualicemos el blog principal con nuevos reportajes fotográficos. El programa de navegación para esta temporada está contenido en el reportaje número 71 del blog principal (velerotintin.blogspot.com) con el título: TAILANDIA, NUEVA TEMPORADA DE NAVEGACIÓN. Os agradecemos vuestro seguimiento y os animamos a que dejéis vuestros comentarios. Un cordial saludo. Isabel&Guillermo
2º
01 DE ENERO 2016
LISTOS PARA ZARPAR
Hemos subido al blog principal velerotintin.blogspot.com un nuevo reportaje fotográfico sobre los últimos trabajos de mantenimiento que hemos realizado a bordo del Tin Tin. Visitar el blog y si el reportaje es de vuestro interés, podéis dejarnos un comentario en el mismo. Por fin ya estamos listos, los monzones del NE se han estabilizado y el Tin Tin arde en deseos de surcar los mares de nuevo. Mañana, con la marea, saldremos de la marina de Krabi en dirección a unas islas cercanas desde las que os reportaremos de nuevo. Un cordial saludo. Isabel&Guillermo
3º
02 DE FEBRERO 2016
ARRIBAMOS A LAS ISLAS DE KO DAM
Salimos de la marina de Krabi con la marea del medio día y pasamos la parte menos profunda de la ría con 1,20 metros de agua bajo la quilla. Un viento de 15 nudos nos dio la bienvenida de nuevo y por la proa teníamos las islas de Ko Dam. Una mar bella nos permitió navegar a cinco nudos con sólo ¾ de génova. Nos dirigimos a la parte sur del conjunto de islas que contiene las dos principales: Ko Dam Hok y Ko Dam Khwan. Concretamente en ésta última se encuentra Chicken Head, una enorme y espectacular roca vertical que, dependiendo de la perspectiva, parece el cuello y la cabeza de un pollo. Las dos islas están unidas por una lengua de arena blanca que a la pleamar desaparece. El lugar es muy bonito. Estamos fondeados sobre 12 metros de agua en l: 07º57,67'N L:098º48,39'E.
4º
03 DE ENERO 2016
NOCHE ESTRELLADA Y PRIMERA EXPLORACIÓN
Pasamos la primera noche muy relajados tras una puesta de sol espectacular. Nuestra intención era ver una película después de cenar, pero nos quedamos en la cubierta observando las siluetas de las islas cercanas y el horizonte donde se podían apreciar intensas luminarias de los calamareros. El viento se mantuvo sobre los 15 nudos del ESE inundando de frescor el interior del Tin Tin, sometido hasta hacía poco a un intenso sol. Mecidos por la suave brisa y las ligeras olas nos quedamos dormidos bajo las estrellas y poco después despertamos bajo la mirada acogedora de la constelación de Orión. Una primera noche aislados en este paraje (Ko Dam) donde pudimos experimentar de nuevo una magnífica sensación de paz. A la mañana, botamos el dinghy y nos fuimos a una playa cercana rodeada de un extenso arrecife con aguas claras. Poco después llegaron algunas embarcaciones tradicionales con turistas asiáticos en su mayoría e inundaron el lugar desapareciendo la magia, por lo que cambiamos de emplazamiento. Recorrimos la isla situada más al norte la cual presenta unas paredes verticales con multitud de vegetación haciendo equilibrismo. Pasadas unas horas volvimos para el Tin Tin y proseguimos con nuestra vida normal de fondeo. Mañana zarparemos para la parte sur de Phuket.
5º
4 DE ENERO 2016
PESCA TRADICIONAL A BORDO DEL TIN TIN
Al nochecer largamos por la popa un aparejo de pesca con cuatro robustos anzuelos separados entre si una braza. Como cebo utilizamos trozos de pulpo que portamos congelado a bordo y expresamente destinado a la pesca con anzuelo. La noche fue obscura y un viento del NE se mantuvo entorno a los 10 nudos. Poco antes de ponernos a cenar un grueso elástico empezó a estirarse de manera compulsiva lo que indicaba que algo había picado. Con sendos frontales luminosos atendimos con prontitud el evento y poco después hacía acto de presencia una hermosa raya, la cual fue liberada del anzuelo lo más delicadamente que pudimos marchándose hacia las profundidades nadando de forma pausada. Debíamos persistir para intentar conseguir un pargo o un mero para la comida del día siguiente, por ello, una vez cebados de nuevo los anzuelos, arriamos de manera decidida el aparejo hasta el fondo. Cenamos y posteriormente nos dispusimos a ver una película en la propia bañera de la embarcación. No había transcurrido más de media hora cuando de nuevo el elástico nos avisaba de que algo se debatía al final de la línea ¿sería nuestro pargo? Poco a poco fuimos halando el aparejo y nuestros puntos luminosos no hacían más que escudriñar entre las aguas para ver cuanto antes la silueta del pez... pero algo demasiado alargado había picado ¡una morena! giraba y se retorcía en el anzuelo intentando deshacerse del cepo. Y de nuevo soltamos a la presa y esta huyó despavorida. De esta manera dimos por acabada la incursión pesquera y siendo siempre positivos pensamos antes de irnos a dormir ¡mejor para los peces!
6º
05 DE ENERO 2016
NAVEGANDO HACIA EL OESTE DE LA ISLA DE PHUKET
Amaneció un día fantástico. El sol hizo acto de presencia en el camarote desde las primeras horas del día. En el exterior se mantenían erguidas las murallas de piedra en forma de pequeñas islas con una vegetación iluminada y gran algarabía de trinos por todas partes. Desayunamos, rompimos la armonía poniendo el motor propulsor en servicio y poco después halábamos el aparejo de fondeo. Dejamos por babor los islotes de Ko Ya Wa Sam y arrumbamos a la parte sur de la isla de Phuket. Un viento franco del ENE soplaba con una intensidad entre los 12 y los 16 nudos. Al ser un rumbo portante, el aparente disminuyó sensiblemente, pero dio para avanzar a unos 4 nudos. No teníamos prisa y una mar bella invitaba a relajarse y dejarse llevar. A medida que nos alejábamos del sotavento de Ko Dam, el viento se alargó rolando al norte y nos permitió alcanzar fácilmente los 5 nudos. El extremo sur de la gran isla Ko Yao Yai nos quedó por estribor y con los prismáticos pudimos observar un poblado pequeño de pescadores musulmanes en el interior de la bahía de Yao. Poco a poco el viento fue cayendo y rolando, estableciéndose en la popa cerrada. Entonces fue necesario poner el motor nuevamente a pocas revoluciones con el fin de dar una media de 5 nudos. Un calor sofocante lo inundó todo, el viento aparente era 0 nudos. Fuimos dejando por babor las pequeñas islas de Ko Dai Mai, Ko Mai Thon, Ko Aeo, Ko Hi hasta llegar al extremo sur de la gran isla de Phuket que quedaba a nuestro estribor. Por este área el viento arreció significativamente y roló al norte lo cual alivió la temperatura y enmudeció el motor. Cuando enfilamos la entrada de la bahía Nai Harn observamos al fondo ocho veleros fondeados frente a una hermosa playa de arena blanca y salpicada de numerosos chiringuitos turísticos. Buscamos emplazamiento y largamos el hierro en posición l: 07º46,40'N L: 098º 18,10'E sobre 15 metros de agua y fondo arenoso donde nos inmovilizamos de inmediato.
7º
06 DE ENERO 2016
ROLADA Y RESPLANDORES LEJANOS
Antes del anochecer, el viento roló 180º y nuestra popa quedó mirando para la playa. Afortunadamente estábamos a suficiente distancia de ella como para no preocuparnos y los 50 metros de cadena filada propiciaban un buen nivel de seguridad. Por otro lado las embarcaciones nos mantuvimos entre si a una prudencial distancia de seguridad como corresponde normalmente entre veleros de crucero con abundantes millas de experiencia. Del exterior de la bahía empezó a entrar una ligera mar de fondo que no llegó a incomodar demasiado. Mientras tanto el sol se derrumbó en vertical sobre el horizonte y una capa de nubes cubrió rápidamente el ocaso. Hacia el este observamos lejanos e inquietantes resplandores de los rayos de una tormenta que podía verse perfectamente representada en la fotografía de satélite que bajamos todos los días. Poco después un ligero chubasco mojó la cubierta del Tin Tin sin más contratiempos. La noche pasó tranquila, en silencio, con un moderado viento del WSW que refrescó el ambiente propiciando un reconfortante sueño.
8º
07 DE ENERO 2016
NAVEGANDO LA COSTA OESTE DE PHUKET
De nuevo amaneció esplendoroso. El viento había vuelto a rolar estableciéndose del NE y en torno a los 15 nudos. Tras desayunar y una vez a bordo el aparejo de fondeo, aproamos hacia la parte norte de la isla de Phuket navegando por su cara oeste. El viento arreció por razones orográficas ya que se deslizaba entre las altas colinas acelerando al desembocar en la mar. Regulamos las velas a las circunstancias y con una ceñida abierta conseguimos rápidamente los seis nudos de velocidad. Al quedarnos relativamente cerca de la costa, ya que navegábamos a unas dos millas de distancia, empezamos a sufrir recalmones, aceleraciones bruscas y contrastes importantes en la dirección del viento. Ello incomodó bastante la navegación y nos obligó a alejarnos más de la costa con el fin de obtener un viento franco. Debíamos estar también muy atentos para maniobrar a la multitud de boyas con banderitas de colores que señalaban artes de pesca y que se agrupan por áreas determinadas. Una vez pasada la bahía de Ao Bang Thao observamos que una sección de aproximadamente 50 centímetros de la banda de protección anti UVA de la baluma del génova, se había descosido. No nos quedó más remedio que enrollar la gran vela por completo, izar la trinqueta y navegar con esta disposición junto a la mayor. La velocidad cayó en picado, no sólo por el disminuido plano vélico, sino también porque la intensidad del viento amainó significativamente a partir de ese momento. Cuando arribamos a Nai Yang había fondeados cuatro veleros y ya desde lejos pudimos observar con los prismáticos que se balanceaban bastante como consecuencia de la mar de fondo que entraba en el lugar. Fondeamos en l: 08º 05,43' N y L: 098º 17, 54' E sobre 7 metros de agua clara, fondo arenoso y 40 metros de cadena.
9º
07 DE ENERO 2016
REPARACIÓN DEL GÉNOVA Y MAR DE FONDO
Aún faltaba una hora para la puesta del sol cuando el viento se calmó por completo, aunque pensamos que no iba a ser por mucho tiempo. Rápidamente lo dispusimos todo para arriar el génova, desenrollamos la vela completamente, dejamos la driza libre, dos vueltas sobre el winche, la escota de sotavento templada y uno de nosotros en proa para tirar hacia abajo del grátil. Todo transcurrió correctamente y muy rápido la gran vela se depositó inerte sobre cubierta. Ya teníamos preparado el punzón, las agujas y el hilo de dacrón, así que nos pusimos en tarea. Lentamente pero sin pausa fuimos progresando hasta que concluimos la costura y a partir de ese momento empezamos a mirar el cielo en busca de algún signo que nos indicase la irrupción de alguna ráfaga de viento. Todo parecía continuar en calma, así que nos dispusimos a izar los 70 metros cuadrados de vela de 8 onzas de grosor y 50 kilos de peso. La tarea no fue tan sencilla como en la arriada, le fuimos dando una ligera capa de vaselina a la relinga mientras a fuerza de winche iba elevándose sobre cubierta. Y como no podía ser de otra manera, el viento hizo acto de presencia cuando llevábamos el 50% de la tarea. El Tin Tin cogió arrancada, se detuvo a los pocos metros sometido a la cadena de fondeo y viró. El génova, al tomar el viento por el lugar contrario, quedó apoyado sobre el stay de trinqueta, drizas de respeto y asimétrico, contras, amantillos, parte intermedia del mástil y sobre la antena del radar. Tuvimos que detener la maniobra de izado, esperando que el viento no fuese en aumento y confiando que tarde o temprano el Tin Tin volvería a virar. Y así lo hizo unos minutos después pudiendo completar la maniobra exitosamente. Desde que habíamos arribado al lugar una ligera pero molesta mar de fondo entraba en el área de fondeo. Por el día, cuando las brisas térmicas hicieron rolar a la izquierda el original viento de gradiente, la proa se alineó más o menos con la dirección de las olas y la embarcación sólo daba un movimiento suave de cabezada, pero al atardecer la tierra volvió a enfriarse y el monzón del NE (viento de gradiente), se estableció de nuevo y el Tin Tin tomaba la mar de fondo casi de través originando de vez en cuando desagradables sincronismos en el balance. Y así transcurrió la noche, estrellada, silenciosa pero acunados...más bien zarandeados.
10º
08 DE ENERO 2016
METEOROLOGÍA Y ZARPE HACIA BAN THAP LAMU
La verdad es que nos cuesta bastante recordar los nombres de los lugares por los que pasamos. Entendemos que estas palabras son la traducción fonética de los nombres originales escritos con caracteres tailandeses y por eso nos suenan tan extraños y poco familiares. Despertamos muy pronto, casi casi, con las primeras luces del día, bajamos los diferentes modelos de partes meteorológicos (meteofax, fotografía satélite y grib files) y decidimos zarpar para continuar nuestro periplo hacia el norte. La noche no había sido muy cómoda como consecuencia de la mar de fondo y queríamos cambiar de lugar de manera inmediata. Como siempre que el monzón es débil y en una navegación costera (a no más de 12 millas), a primeras horas el viento sopla de componente NE como corresponde en esta época a los monzones del periodo seco (de mediados de noviembre hasta principios de mayo) y a medida que la tierra se va calentando diariamente por la acción del sol, el virazón (viento de carácter térmico) empieza a pugnar con el monzón hasta anularlo (con un periodo de calma entre ambos de una hora). Posteriormente el térmico se impone rolando significativamente al NW o incluso al WNW hasta que al anochecer la tierra se enfría y se vuelve a restablecer de nuevo el viento general (monzón). Conocer las características meteorológicas concretas de cada lugar y saber aprovecharlas, es una disciplina que todo navegante debe de saber interpretar correctamente con el fin de optimizar el rendimiento de su velero y tener un amplio margen en términos de seguridad. Por la banda de estribor fuimos dejando una inmensa playa sin interrupción cuya longitud llegamos a calcular en unas 20 millas (37 kilómetros). La mar se mantuvo bella con un viento que oscilaba entre los 10 y los 16 nudos posibilitándonos navegar desde una ceñida cerrada por estribor hasta un través por babor. Una travesía con algunas maniobras pero en general muy cómoda y agradable. Después de comprobar una vez más la tabla de marea, las enfilaciones y balizas señalizadoras que indican las cartas y los derroteros, afrontamos el último tramo de la singladura atravesando la barra e introduciéndonos en la ría de Ban Thap Lamu. Un lugar con un área muy grande de fondeo de calados que oscilan entre los cuatro y los ocho metros, pero con una población desastrosa basada en una serie de pontones destartalados donde descargan y amarran decenas de pesqueros de todas las artes. Por otro lado, mezclado entre el desorden, decrepitud y suciedad, se encuentran los terminales de varias empresas turísticas con multitud de embarcaciones rápidas de cuatro motores fuera borda que llegan a tener hasta 300 Hp cada uno. Y pululando entre todo ello, cientos de turistas blanquitos, con sus camisas de colores y gorras caladas. El lugar es caótico y no nos ha gustado, ni siquiera nos hemos propuesto desembarcar. Fondeados sobre siete metros de agua en l:08º 33,90' N L:098º 13,20' E y con 30 metros de cadena filada.
11º
09 DE ENERO 2016
AVERÍA Y SOLUCIÓN RÁPIDA
Al día siguiente amanecimos sobre una lámina de agua en perfecto reposo, con un sol amenazador y con el triste espectáculo que se representaba en tierra. Pusimos el motor en servicio y nos dispusimos a desayunar. Treinta minutos después levamos el hierro y ya navegábamos hacia el canal se salida, cuando en una inspección rutinaria observamos que en la sentina del motor había una pequeña cantidad de líquido refrigerante. El hecho nos produjo cierta sorpresa y decidimos retornar nuevamente al punto de fondeo. Posteriormente, y después de hacer un examen concienzudo del problema, descubrimos que la fuga se producía por la conexión de un pequeño tubo que comunica el tanque de expansión/almacenamiento con la instalación del turbo. La avería no parecía revestir demasiada importancia, así que cuando procedimos a reapretar el terminal, nos dimos cuenta que la pieza roscada que encastra en el tanque metálico de expansión giraba, se había des-soldado y por lo tanto no permitía apretar convenientemente el tornillo de comunicación/fijación de la mencionada tubería. Así que procedimos a vaciar parte del líquido refrigerante contenido en el tanque hasta dejar el nivel por debajo de la descarga que nos ocupaba y con la Dremel lijamos cuidadosamente todas las partes anexas a la conexión. Una vez limpio y preparado, aplicamos Araldit rápido para fijar la pieza y posteriormente realizamos de nuevo la conexión. Todo quedó satisfactoriamente, así que dos horas después, ya estábamos de nuevo en marcha. Enfilamos el canal de salida siendo muy escrupulosos al seguir el track que habíamos dejado en nuestras cartas electrónicas a la entrada y poco después ya navegábamos en aguas libres con rumbo norte.
12º
10 DE ENERO 2016
CEBO DE PLÁSTICO Y PASE DE LA BARRERA
Cada treinta minutos revisábamos el motor por si persistía la fuga, pero la reparación había sido correcta. El rumbo inicial fue un poco al oeste con el fin de alejarnos de un área de bajos fondos. El viento era justo para posibilitar una ceñida cerrada ayudada con un punto de motor. De esa manera conseguíamos una velocidad de entre 5,0 y 5,8 nudos. Teníamos algo más de 30 millas y estábamos pendientes del horario de la marea para entrar en el destino. Doblamos bastante abiertos la punta de Laem Hua Krang Yai y metimos rumbo a estribor con lo cual el viento se alargó pudiendo navegar sólo a vela. Un señuelo de plástico, que imita una pequeña caballa de movimientos rápidos y convulsivos, nos perseguía por la popa a unos 25 metros de distancia coleando tranquilamente y sin arriesgar en absoluto su integridad física. Las aguas permanecen muy transparentes pero un exceso de explotación pesquera de inmaduros (que ya denunciamos en anteriores temporadas) está acabando con un recurso vital para la inmensa mayoría de la gente humilde de estos países. Pero por nuestra parte que la ilusión no decaiga, en todos estos días sólo hemos tenido una picada fallida de un pez desconocido y extrañamente superviviente. Las dos horas que empleamos en Ban Thap Lamu para arreglar la avería, nos iban a pasar la factura de la incertidumbre a la hora de afrontar el pase de la barra de Chong Ko Phra. Poco a poco nos fuimos acercando al lugar y llegamos con la marea a bajamar. Las cartas indicaban un calado mínimo de 3,30 metros, la altura de la bajamar era de 0,50 por lo que la altura en el momento en teoría sería de 3,80 y si a esto le descontábamos los 2,20 metros de calado del Tin Tin, teníamos 1,60 metros de agua bajo la orza. En un principio era suficiente para pasar con relativa seguridad, pero el lugar al que pretendíamos entrar es un paraje absolutamente aislado y solitario ¿y si las corrientes de marea cambiaron los depósitos de sedimentos? ¿y si la batimetría no fue correcta? ¿y si...? Pasar con media marea sería impensable puesto que coincidiría con la noche. Manteniendo todas las reservas sobre la situación, teniendo en cuenta la ausencia de ola en la barra y sobre todo que la marea estaba en creciente, nos fuimos adentrando a poca máquina. Siempre que la sonda baja y sigue bajando se pone un nudo en la garganta que hay que saber gestionar con el fin de que los temores y dudas sean reemplazados por la razón y la lógica. Pasamos lo peor con una sonda mínima de 1,40 metros bajo la orza y posteriormente accedimos al canal de entrada más profundo. Ante nosotros un mundo de canales interiores en un paraje salvaje y auténtico. En aguas calmas y protegidas por la barrera, aunque con una corriente de marea apreciable, largamos el hierro en l:09º 01,63'N L:098º 16,23'E sobre siete metros de agua, fondo arenoso y cuarenta metros de cadena filada.
13º
11 DE ENERO 2016
ROMANTICISMO NÁUTICO Y COSMOLOGÍA
Nuestro último fondeo, tras pasar la barrera de Chong Ko Phra, ha sido altamente reconfortante, un lugar espectacular, absolutamente paradisíaco. Inmovilizados sobre aguas calmas tras la barrera, con una extensa playa a babor cerrada hacia el interior por una tupida foresta y a estribor la inmensidad del océano sobre el que ha ido cayendo un sol cada vez más anaranjado y achatado por los polos. Si hay momentos para soñar, este ha sido uno de ellos, solos y a las puertas de un enorme mundo de manglar con numerosos meandros y afluentes perdidos por la costa occidental tailandesa. Al fondo el crepúsculo vespertino dejaba ver altas montañas forradas por impenetrables selvas que se iban solapando las unas a las otras con tonos cada vez más blanquecinos, quizás las nieblas boscosas de los profundos valles. Se hizo la noche, una noche oscura, sin Luna, y la inmensidad del firmamento fue ocupando poco a poco todo lo visible hasta inundarlo de estrellas. Y como no podía ser de otra manera, en esta época y en una latitud tan baja, la constelación de Orión se fue elevando en su tránsito por el ecuador celeste hasta quedar prácticamente en nuestro cenit. Fugaces uranolitos dejaban efímeras estelas que nos sorprendían de vez en cuando haciéndonos girar inesperadamente la cabeza. Una noche en la inmensidad del universo donde ni siquiera la foresta cercana esgrimía el más mínimo sonido. Y embelesados por el lugar y las circunstancias, hasta nos animamos a despertar poco antes del amanecer y prismáticos en mano buscamos al cometa Catalina, ese viajero tan especial de fuera de nuestro sistema solar que nos visita por primera y última vez para después perderse nuevamente en la infinidad del cosmos, bien merecía nuestro saludo. Escrutamos el cielo poniendo especial énfasis en la parte norte y en concreto en un área comprendida entre la constelación de Bootes y la constelación Corona Borealis, pero no fuimos tan afortunados y fracasamos en el intento, lo seguiremos intentando.
14º
11 DE ENERO 2016
RODEADOS DE MANGLAR
Como casi todos los días amaneció con un sol radiante que se elevó sobre las montañas del interior. Ante nosotros las aguas protegidas de un extenso manglar con numerosas bifurcaciones y un canal principal con profundidades que oscilan entre los 4,0 y los 12,5 metros. A poca máquina y disfrutando de un paisaje salvaje e inalterado, nos fuimos internando en él con un ojo puesto en la sonda y otro en el perímetro natural. A estas horas de la mañana la marea ya había llegado a la pleamar y en breve empezaría su retirada ofreciéndonos una media de 1,5 nudos de corriente en contra. El Tin Tin se deslizaba sobre aguas absolutamente encalmadas y a través de un ancho canal flanqueado de densos manglares. Estábamos rodeando por el interior la isla de Ko Phra Thong que iba quedando a babor, un área de escasa altitud, impresionantes raíces de manglar y enigmáticos pasadizos semi-ocultos. Dejamos a estribor la península de Khao Bai Sai donde un minúsculo poblado resaltaba a duras penas sobre el paisaje. Un par de pequeñas embarcaciones tradicionales de pesca se mantenían fondeadas y de una de ellas salió un brazo que con la mano en alto nos saludaba. Continuamos la navegación admirando una naturaleza inalterada aún por el turismo como muestra de la auténtica Tailandia litoral. Varias horas después teníamos por babor la isla Ko Ra en cuyo extremo NE teníamos la intención de fondear. Esta isla es más alta y montañosa que la anterior ofreciendo espléndidos lugares de fondeo. Una vez en el lugar elegido, largamos el hierro en l:09º14,93'N L:098º19,08'E sobre 12 metros de agua, en zona de bastante corriente de marea. Probablemente quedemos durante unos días sin posibilidad de enviar estas crónicas ya que la señal del sistema se debilita por momentos ¡que no cunda el pánico!
15º
16 DE ENERO 2016
SETAS DESHIDRATADAS Y SOLOMILLO DE CERDO
Parece que la comunicación con Sailmail se ha recobrado y por lo tanto continuamos enviando las crónicas. Esta zona de la isla de Ko Ra es muy bonita con una pequeña playa y dos antiguas construcciones a modo de pontones de desembarco cuya misión pasada fue la de asistir a un hotel de carácter ecológico que hoy yace en ruinas. Cerca del punto de fondeo, y medio escondidas entre la foresta, hay cuatro casas tradicionales por donde se ve muy poco movimiento. Tras desayunar tranquilamente y permitirnos el lujo de tener señal de Internet que provenía de una población pesquera al otro lado de la ría, arriamos el auxiliar. Embarcamos todo el equipo de buceo y nos dirigimos hacia el exterior doblando la punta que nos daba cobijo. Nos adentramos en una pequeña bahía y fondeamos la semi-rígida en cuatro metros de calado sobre un fondo rateado de arena y roca. Una vez en el agua intentamos buscar algún lugar cercano del arrecife donde hubiera movimiento de peces interesantes, pero fue imposible encontrarlo. Al poco rato se acercó una embarcación tradicional con un policía o militar a bordo (es difícil diferenciarlos exactamente dados los galones, estrellas, emblemas y placas que portan en sus uniformes) que hizo señales para que nos acercásemos. Temiéndonos que el área estuviera protegida (¿?) y no se pudiera ejercitar la pesca submarina, disparamos el fusil para que clavase el arpón en la arena y dejar fondeado el arma. Una vez al costado de la embarcación, el agente nos habló en tailandés y por nuestra parte preguntábamos en inglés ¿cual era el problema? Tras un diálogo de sordos, el hombre esgrimió una grata sonrisa al ver la cámara fotográfica submarina y nos pidió que le sacásemos una fotografía. Un apretón de manos y una efusiva despedida nos dejó perplejos y gratamente confusos marchándose por donde vino. El fusil sólo realizó aquel disparo preventivo en toda la jornada, así que después de un par de horas intentando conseguir la tan ansiada proteína fresca dimos por terminada la incursión. A penas vimos un par de pargos huyendo despavoridos y que podían dar la talla, el resto bonitos peces de colores. De vuelta a bordo del Tin Tin preparamos un arroz con setas deshidratadas y solomillo de cerdo.
16º
16 DE ENERO 2016
RUMBO A LAS SURIN
Dos días nos pasamos en el lugar disfrutando de la paz y la tranquilidad. La pesca no estaba siendo nada productiva, pero al menos el tiempo y el paisaje compensaban con creces. Al tercer día decidimos zarpar hacia las islas Surin situadas a unas treinta millas de la costa y que forman parte de un Parque Nacional. Estas islas se encuentran a escasas millas de la frontera con Myanmar, la antigua Birmania. La mar se presentaba bella y un incipiente viento de componente norte empezaba a dar sus primeros soplos. El rumbo debido nos permitía llevar por un través el viento aparente, por lo que desplegamos completamente los planos vélicos del Tin Tin y tras un trimado cuidadoso, conseguimos los cinco nudos de velocidad. Por la popa nos seguían dos fieles señuelos artificiales, un pez articulado de colores y movimientos erráticos y un pulpito de color crema, quizás los dos únicos seres animados en muchas millas alrededor. No obstante manteníamos ciertas esperanzas de pesca al dirigirnos hacia aguas profundas y, en teoría, protegidas de la explotación comercial al entrar en el perímetro de las Surin. Algunos peces voladores y grupos de gaviotas eran buenos indicadores de que algo se pudiera estar cociendo bajo las aguas, pero fieles a nuestro acentuado espíritu ecologista, terminamos la singladura sin ninguna captura. A nueve millas antes de recalar en la isla sur, pasamos a escasa distancia de un peligroso bajo llamado Richelieu Rock que por fortuna está perfectamente indicado en las cartas náuticas. Este bajo es la cúspide afilada y de escasa extensión de una colina submarina que sólo se ve a bajamar. Las guías dicen que es un lugar muy bueno para hacer buceo autónomo y que de vez en cuando se ven tiburones ballena. Para los curiosos, la posición del bajo es: 09º21,90'N/098º01,27'E. Una vez arribamos a la parte SE de la isla Koh Surin Tai, decidimos acercarnos a costa para investigar el lugar antes de decidir la recalada. Observamos la existencia de tres moorings (balizas que ofrecen un punto de amarre y que constan de un peso muerto de importantes dimensiones en el fondo, un trozo de cadena de varios metros y posteriormente un cabo hasta la superficie) y decidimos tomar uno para pasar la noche. El calado bajo la baliza impresionante ¡42 metros! a tan solo 50 metros de la costa, posición: 09º22,77'N/097º52,78'E.
17º
16 DE ENERO 2016
16 DE ENERO 2016
NOCHE DE VIGILIA
Las instrucciones del parque indican que hay tres tipos de moorings. Los indicados con una baliza de color blanco soportan las cargas generadas por embarcaciones cuyo desplazamiento sea de un máximo de 10 Tm, los de color rojo 18 Tm y los de color amarillo 30 Tm. Nosotros nos encontrábamos amarrados a una baliza roja y nuestro desplazamiento en ese momento lo estimábamos en 16.500 kg por lo tanto estábamos dentro de los parámetros indicados. El resguardo que ofrecía el lugar estaba al límite, a poco que el viento o la mar rolase al este, nos afectaría de lleno, no obstante, independientemente de la flexibilidad que hay que darles a los partes meteorológicos, todo indicaba que las condiciones se mantendrían estables. Cuando ya estaba cayendo el crepúsculo, se aproximó al lugar una compacta embarcación a motor de unos 25 metros de eslora con un puñado de turistas rusos. La música que compartían en el fondeo afortunadamente era melódica y de calidad. Prepararon una barbacoa y nos pusimos en lo peor cuando se suponía que llegaban los postres y con ellos el vodka, pero tras un día de sol y buceo, el personal estaba derrotado. Nos sorprendió gratamente observar que la embarcación apagaba las luces de servicio y en absoluto silencio todo el mundo dormitaba meciéndose a nuestra banda de babor. El lugar en el que nos encontrábamos estaba también afectado por corrientes de marea, por eso con la vaciante el Tin Tin dirigió su proa hacia ella (el elemento más fuerte en aquel momento) mientras el viento nos entraba por la popa y una incipiente mar de fondo por el través de babor. Y sería precisamente ésta marejada residual la protagonista de las siguientes horas. El Tin Tin se debatía entre los tres elementos, hasta que en un momento dado el largo cabo de amarre a la baliza pasó por debajo del barco obstruyéndose entre la orza y el timón. La situación se tornó inquietante ya que se podían producir averías en la hélice o en la propia pala del timón si el viento o la mar de fondo aumentaban. Así que en plena noche maniobramos con los cabos y sus importantes tensiones hasta liberar al Tin Tin de la trampa y para finalizar suspendimos la baliza de la proa para que el cabo de amarre quedase en banda y no la volviese a liar. Serían sobre las 23.30 horas cuando una importante mar de fondo hizo acto de presencia. La situación empezaba a ser subrealista: todos los elementos (viento, corriente y mar de fondo) desatados y cada uno de ellos de una dirección diferente. Al poco rato la motora abandonó el mooring y se hizo a la mar rodeando la isla buscando la cara de sotavento, maniobra que no era aconsejable para nosotros ya que desconocíamos la zona y no disponíamos de información sobre un área de poco calado y sembrada de bajos y cabezas de coral. Arrancamos el motor y tuvimos todo listo por si la situación se hacía insoportable manteniéndonos en guardia permanente. Sobre las 04.00 la mar de fondo se fue atenuando y nosotros relajando de igual manera. Amaneció con un sol radiante, una mar incómoda y nuestros párpados a media hasta.
18º
16 DE ENERO 2016
HACIA EL NORTE DE KO SURIN NUA
Después de una noche problemática y agotadora, tras desayunar largamos las amarras dirigiéndonos hacia la parte norte de la siguiente gran isla: Ko Surin Nua. Nos sentíamos cansados pero satisfechos de abandonar el lugar después de largas horas de incertidumbre. Rodeamos la isla de Ko Torinla dejándola por estribor y pasando por amplias zonas donde el agua se arremolinaba con violencia como consecuencia de la corriente de marea (amplitud de 2,9 metros). El Tin Tin se sentía libre de nuevo y navegaba como acostumbra a hacerlo, con suavidad y armonía. No quisimos abrir velas para aprovechar el sutil viento, sólo un poco de motor y una velocidad de cuatro nudos satisfacía todas nuestras expectativas para navegar las diez millas que nos separaban del próximo destino. Poco después dejamos por babor la bonita isla de Ko Pachumba con sus dos playas de arena blanca. Pasamos frente al canal que separa las dos islas principales, un estrecho que las cartas indican como navegable, pero a la vista de sus características no pensamos que se pueda hacer con total seguridad. Grandes áreas de escaso fondo y salpicadas de cabezas de coral lo desaconseja el sentido común. Pocas millas después entramos en una pequeña bahía muy bonita, abierta al oeste y que ofrecía un buen nivel de protección de los vientos de componente norte. A pesar de estar absolutamente solitaria dispone de varios moorings en la proximidad del arrecife, pero obviamente y en prevención de malas mares, preferimos mantenernos al ancla. Y ello nos lo facilitó una gran mancha de arena fondeando sobre 15 metros de agua en posición: 09º26,30'N/097º51,37'E.
19º
17 DE ENERO 2016
TRANQUILIDAD, DESCANSO Y BUENOS ALIMENTOS
No podíamos esperar mejor lugar para pasar unos días absolutamente aislados y en un lugar paradisíaco. Por la densa foresta que cierra por los laterales la bahía donde nos encontramos, vuelan de vez en cuando varías águilas de cuello y cabeza blanca. Al fondo hay una playa sólo accesible a partir de media marea ya que un extenso arrecife rodea por completo el saco de la bahía. Otra pequeña playa accesible en todo momento se sitúa en la parte norte. Las aguas son muy transparentes pudiendo disfrutar de una visibilidad superior a los veinte metros. Desde que llegamos, por los alrededores del Tin Tin, pululan varios grupos de calamares de los cuales al menos una docena ya han sido capturados en pro de nuestra diversidad alimenticia. De igual manera hemos pescado en el arrecife varias langostas y un par de meros de notable tamaño y calidad. Sólo escuchamos a los pájaros trinar entre la foresta y el escaso ruido de la mar rompiendo en los extremos de las puntas que cierran el lugar. Ahora sólo falta que la próxima madrugada podamos observar al cometa Catalina ¿se puede pedir más?
20º
18 DE ENERO 2016
EL COMETA Y LA ECOLOGÍA
Y por fin pudimos ver al cometa Catalina con la ayuda de unos prismáticos. Se situaba exactamente entre las estrellas Alkaid y Alioth que forman parte de la cola de la constelación de la Osa Mayor. Tuvo que ser antes del amanecer cuando la constelación estaba muy elevada sobre el horizonte. El Catalina no es nada espectacular visto con un sistema tan sencillo como unos simples prismáticos. Se presenta como una mancha luminosa, relativamente difuminada mostrando dos pequeños apéndices que se supone son las dos colas del fenómeno. Ha sido un momento especial teniendo en cuenta que este cometa viene del exterior de nuestro sistema solar y hacia él se dirige de nuevo para perderse en la inmensidad del firmamento. Al contrario que otros cometas que son periódicos y cada ciertos años se pueden ver de nuevo, el Catalina no volverá jamás a nuestro sistema solar, por ello fue una buena oportunidad para ver, con ojos de humano, un astro tan cerca de la Tierra y al mismo tiempo de tan lejano origen y destino. Después del madrugón, el día se presentó algo desapacible. Los pronósticos meteorológicos indican que cierta inestabilidad está entrando por el sur y ello traerá algún núcleo tormentoso. En un principio no parece que tenga mayor importancia, pero tal y como están las cosas de la climatología a nivel mundial, tenemos que andar siempre con un ojo en el paisaje y otro en el cielo. Buceamos en la barrera y sacamos bellas imágenes con nuestra nueva cámara submarina. La pesca es abundante y de gran calidad, pero pese al gran congelador que porta el Tin Tin, decidimos capturar solamente lo necesario que cubra la alimentación diaria. El contacto directo con la naturaleza y la observancia del medio natural en el que nos desenvolvemos, nos hace cada vez más sensibles y ecológicos.
21º
19 DE ENERO 2016
NUBOSIDAD Y ACTIVIDAD SUBMARINA
El día evolucionó cubriéndose cada vez más de nubes de desarrollo vertical, principalmente hacia el este de las islas Surin que es donde se encuentra la parte continental. En un principio nuestra situación es la adecuada para estar bastante protegidos de los monzones de componente norte (sólo estábamos abiertos al sector comprendido entre es NW al SW) pero ante células tormentosas el comportamiento de los vientos obedece a criterios locales y determinados por la trayectoria de las mismas. Por ello, ante las tormentas no hay lugar que ofrezca total protección, pudiéndose llegar a darse casos en los que el viento rola hasta 180º. Relajados, aunque con la mosca meteorológica tras la oreja, nos fuimos a bucear al arrecife que se encuentra al norte de nuestra posición. Fondeamos la embarcación auxiliar en una pequeña mancha de arena y una vez en el agua nos dedicamos a realizar bellas grabaciones con la nueva cámara submarina. Las grandes cabezas de coral situadas frente a la playa y a una profundidad entre los seis y los catorce metros, fueron el objetivo principal. Cuando llegamos varios cardúmenes de peces loro y cirujanos pululaban por el fondo sin preocuparles demasiado nuestra presencia. Siempre manteniendo la distancia algunos grandes ejemplares de pargo nos observaban curiosos con movimientos lentos y pausados. Entre las grandes cuevas o intrincadas grietas que hay en las formaciones coralinas, vimos varias langostas y sorprendimos a mimetizados meros haciendo guardia en la entrada de las oquedades. Todo este mundo natural sumergido inspira estabilidad y equilibrio, y estando nuestras necesidades vitales de proteína fresca cubiertas, simplemente nos comportamos como pacíficos espectadores de cuyo paisaje sólo robamos algunas interesantes imágenes.
22º
20 DE ENERO 2016
CAMBIO EN LA METEOROLOGÍA
Por la tarde empezamos a ver como se cubría de altas nubes el conjunto de las islas Surin y poco más tarde, con el crepúsculo vespertino, recibimos el primer chubasco acompañado de varias descargas eléctricas y sus correspondientes truenos. Largamos quince metros más de cadena en previsión de la entrada de alguna fuerte ráfaga de viento y activamos el protocolo específico para estos casos, pero los chubascos que se fueron alternando durante toda la noche, no traían consigo más de veinte nudos. Unas tormentas pasaban entre las islas y el continente, otras hacia el oeste y algunas sobre nuestras cabezas. En un momento dado estábamos rodeados de núcleos activos y los resplandores de los rayos aparecían por todos los lados. En un principio el fondeo parecía seguro, disponíamos de buen tenedero (calidad del fondo donde se aloja el ancla prefiriéndose arena o fango), teníamos largada suficiente cadena, habíamos largado al agua los descargadores (cables de cobre de 50 milímetros cuadrados de sección que comunican la jarcia firme con el agua) y nos manteníamos a una distancia prudencial de la costa. Uno se siente muy pequeño ante estas circunstancias y sólo resta esperar a que pase lo peor. De una manera instintiva siempre contamos los segundos que hay entre el rayo y el trueno para saber si la tormenta se acerca o se aleja. Por la tarde habíamos bajado el parte meteorológico que emite el servicio estatal de Tailandia y en el cual se indicaba que una masa de aire frío proveniente de China había entrado en altura produciendo una gran inestabilidad atmosférica. Esta masa de aire frío había chocado contra una masa de aire cálida y húmeda produciendo las tormentas que estábamos sufriendo (algo parecido a las "gotas frías" que ocurren en el sur de España a principios del otoño). El parte también indicaba que las mismas circunstancias durarían varios días. A partir de media noche hizo acto de presencia en la bahía una mar de fondo que fue aumentando paulatinamente hasta hacerse muy incómoda al amanecer. Ante tales circunstancias y teniendo en cuenta las previsiones meteorológicas y el posible empeoramiento de la situación, decidimos abandonar las Surin y dirigirnos hacia tierra en busca de resguardo. El lugar más cercano que ofrecía protección era el área del último fondeo antes de cruzar para las Surin al este de la isla de Ko Ra. Hicimos el cruce con buen viento prácticamente del través y bajo un cielo que combinaba todos los tonos de color gris. En la costa se erguían altas montañas que estaban cubiertas hasta la mitad y se veían cortinas de lluvia que indicaban los lugares donde se estaban dando los chubascos. Cuando doblamos la punta norte de Ko Ra, la mar se aplanó de golpe, las tormentas parecían estar evolucionando por el interior. Pasamos frente al anterior punto de fondeo en la punta NE de la isla y nos adentramos más en el interior del canal principal buscando cobijo en los manglares. Por fin echamos el hierro en 09º11,48'N/098º17,54'E sobre ocho metros de agua absolutamente en calma y rodeados de un verdor exuberante. De vez en cuando un ruido sordo e inquietante, lejano por el momento, nos sobresaltaba.
23º
21 DE ENERO 2016
LA MADRE NATURALEZA Y LA PACIENCIA
Ahora tocaba relajarse y vivir el momento de la mejor manera posible. Estamos rodeados de una foresta impenetrable y en la franja más litoral un extenso campo de manglar muestra sus raíces aéreas. El lugar es absolutamente seguro y protegido, así que esperaremos a que la meteorología se estabilizase. Con la simple contemplación del paisaje que iba variando a medida que el Tin Tin viraba al verse afectado por las corrientes de marea, ya cubrímos gran parte del día. El resto lo ocupamos en la lectura, en la clasificación de fotografías y tomas de vídeos, intentando pescar algo con anzuelo, en la resolución de problemas de ajedrez, escribiendo estas crónicas, visualizando películas y en cualquiera de las muchas labores diarias de mantenimiento que se dan en una embarcación de crucero. A medida que cae la tarde los núcleos nubosos se hacen cada vez más amenazadores y las tormentas más frecuentes. En las primeras horas de la noche se desató toda la ira de la naturaleza y numerosos rayos cayeron por todas partes, un espectáculo extraordinario que conjugaba la belleza con el drama psicológico. Fuertes chubascos descargaron de forma alternativa y entre ellos accedimos al dinghy para vaciarlo de agua recuperando parte para los tanques de almacenamiento. Afortunadamente el viento en los momentos más virulentos fue moderado no llegando a sobrepasar los 25 nudos lo cual ayudó a sentirnos seguros y confiados. Los partes meteorológicos indican que la situación se mantendrá al menos 48 horas, así que paciencia.
24º
23 DE ENERO 2016
CIELOS DESPEJADOS Y ALINEACIÓN DE PLANETAS
Tras dos días de mal tiempo con numerosas tormentas, la situación mejoró y zarpamos navegando por el interior de los canales naturales que conforman este espectacular paraje. Repetimos la ruta pero en esta ocasión en sentido inverso. A penas dieciocho millas para llegar al punto más meridional de la isla de Ko Phra Thong donde fondeamos en 09º01,65'N/098º15,24'E con nueve metros de calado filando cuarenta metros de cadena. El lugar una auténtica maravilla. Botamos el dinghy y nos fuimos a dar un paseo por la playa donde nos dimos varios baños en un agua que ronda los 26º. Estábamos absolutamente solos en un paraje natural donde las nubes fueron retirándose paulatinamente hasta dejar un cielo despejado. El lugar, al ser un paso relativamente estrecho, está afectado por las mareas, las cuales y de forma periódica cambian de posición al Tin Tin aproándolo contra la corriente. Por la noche un nuevo fenómeno hizo acto de presencia en el cielo. Pudimos ver a Venus, Marte, Júpiter y Saturno prácticamente alineados y según los informes astronómicos con los que contamos, también podría llegar a verse Mercurio justo antes del amanecer. La verdad es que entre el Catalina y esta alineación de planetas estamos viviendo un mes de lo más entretenido astronómicamente hablando. La puesta de sol fue espectacular y aparecieron todos los colores posibles a medida que el sol fue ocultándose y transitando por el crepúsculo. Una cena a base de mero y langosta, después la habitual película y posteriormente nos fuimos para el camarote mientras dejábamos transcurrir la noche apaciblemente.
25º
23 DE ENERO 2016
NUEVO REPORTAJE EN EL BLOG PRINCIPAL
Por el presente os comunicamos que hemos podido subir al blog principal velerotintin.blogspot.com un nuevo reportaje fotográfico comentado el cual es un buen complemento de estas crónicas. Con el título 73.- NAVEGANDO POR LA COSTA NOROESTE DE TAILANDIA relatamos las experiencias desde que zarpamos de la marina de Krabi y compartimos con vosotros algunas reflexiones importantes desde nuestro punto de vista. Deseamos que os guste y esperamos vuestros comentarios.
26º
24 DE ENERO 2016
RETORNANDO PARA EL SUR Y DOS HELADOS MAGNUM
Al día siguiente salimos para el sur en dirección al norte de la isla de Phuket. Para finales de mes debemos dar la salida de Tailandia ya que el Tin Tin cumplirá un año en estas aguas y la normativa vigente en materia náutica no permite una estancia superior a las embarcaciones extranjeras. Una vez que demos la salida nos iremos para Malasia, concretamente a la isla de Langkawi, estaremos una temporada por allí y después, para el mes de mayo, cuando de comienzo la temporada mala de monzones, retornaremos a Tailandia, sacaremos al Tin Tin en la misma marina y volveremos para España unos meses. Este es el planteamiento que tenemos, el cual no difiere mucho de la anterior temporada. La mar se presentaba hermosa y el cielo azul, circunstancia ésta que no es muy corriente por aquí debido a la gran cantidad de humedad que contiene la atmósfera. Como siempre nos acompañaba por la popa un pequeño pez de colores articulado, el cual sufrió un ataque inesperado y tras nuestra reacción el pez hambriento consiguió deshacerse de los anzuelos y liberarse. Pasamos dos áreas plagadas de boyas que señalizaban aparejos de pesca y que debimos ir sorteando diestramente con el fin de evitar pillar con la hélice alguno de los cabos. Cuando llegamos al área de fondeo había seis veleros más, algunos conocidos y otros nuevos por estas costas. Largamos el hierro en 08º05,46'N/098º17,43'E sobre ocho metros de agua y con buen tenedero. Posteriormente botamos la auxiliar y nos fuimos a tierra para visitar una pequeña población, donde pudimos comprar algún producto fresco y comernos ¡dos helados Magnun almendrados!
27º
25 DE ENERO 2016
MALA PREVISIÓN METEOROLÓGICA Y FONDEO SEGURO
De nuevo la meteorología impone sus reglas y tenemos un aviso por fuertes vientos para esta parte de Tailandia. Al parecer el gran anticiclón, que en esta fecha se sitúa sobre China continental, se ha reforzado de manera extraordinaria hasta llegar a los ¡1064 milibares! de presión. Ello significa que el gradiente está aumentando de manera considerable por la periferia de la alta presión y en breve nos afectará con vientos, que según las previsiones, rondarán los 30 nudos. Ante esta eventualidad hemos decidido meternos a resguardo en una bahía protegida y profunda que hay en el extremo sur de la isla de Phuket, Nai Harn, lugar éste en el que ya estuvimos cuando navegábamos rumbo al norte. Así que tras desayunar, levamos el ancla y tomamos rumbo sur con una mar absolutamente en calma. A medida que progresábamos fue saliendo viento del ENE que llegó a tener una intensidad de 18 nudos. La distancia hasta Nai Harn era pequeña, apenas 25 millas, por lo que en pocas horas nos encontramos enfilando la entrada de la bahía. Habría como diez barcos, entre veleros y catamaranes, fondeados y bastante diseminados por ello nos tomamos nuestro tiempo para localizar el lugar más apropiado para el Tin Tin teniendo en cuenta que se esperaban fuertes vientos. En primer lugar, y teniendo en cuenta que debíamos compartir el espacio con el resto de la flota, desestimamos fondear próximos a los catamaranes ya que éstos se localizaban más cerca de la playa, en menos agua, y por otro lado se comportan de diferente manera ante las fuertes rachas de viento abatiendo lateralmente mucho más rápido que un monocasco. Buscamos algún velero de crucero conocido cuya tripulación, nos constase, fuese experimentada, pero no había ninguno. Por otra parte debíamos mantenernos alejados de las embarcaciones demasiado nuevas o de charter en el supuesto de que la tripulación también lo fuese. Los barcos muy centrados en la bahía, suelen echar menos cantidad de cadena ya que piensan que si garrean no pasaría nada al haber un espacio ilimitado hacia sotavento. Al final largamos el hierro a la popa y ligeramente a babor de un velero entrado en años, un clásico y afamado modelo con bandera australiana y cuya tripulación, que nos saludó desde la bañera, nos inspiró confianza por su aparente madurez en la vida y en la mar (aspecto físico, estiba de la cubierta, organización de la popa...). Si desconoces a las tripulaciones, en realidad nunca se sabe quien está realmente experimentado y fondea con la suficiente seguridad como para que tu propia seguridad quede asegurada cuando te ubicas en las proximidades de su popa. Pero el instinto fraguado tras años de experiencia, casi nunca nos decepciona. Fondeamos en 14 metros sobre un buen tenedero de arena y largamos 60 metros de cadena para disponer de un buen nivel de seguridad. Nuestra posición: 07º46,54'N/098º17,86'E.
28º
27 DE ENERO 2016
VIENTO Y MÁS VIENTO
Como era de esperar, las rachas de viento empezaron a las pocas horas. Durante este tiempo estuvieron recalando en el lugar algunos veleros más en busca de resguardo. Afortunadamente el área es bastante extensa y podemos situarnos todos sin generar ningún tipo de riesgo. Por la noche entró bastante viento con rachas que superaron los treinta nudos. Por la proa se iba elevando una Luna llena, magnífica, que iluminaba todos los alrededores y hacia que las circunstancias fueran más amables. Por la noche, cuando no hay luna y se está en el medio de un temporal de viento rodeado de costa y otros barcos, la verdad es que, por más que se quiera, no conseguimos relajarnos lo suficiente por mucha confianza que se tenga en el fondeo. Pero aquí el espacio es grande, el tenedero bueno y la luz de la Luna ayuda a ver las cosas con otra perspectiva. Como siempre, después de cenar, vimos una película y en esta ocasión el título elegido fue El coleccionista de huesos. La noche transcurrió en relativa vigilia ya que las fuertes ráfagas nos hacían abandonar el sueño y estar pendiente de los acontecimientos. La alarma de fondeo en el GPS regulada para 0,01 millas (unos 18 metros) no sonó en ningún momento lo que quería decir que el viento era franco y se mantenía de la misma dirección. Cuando amaneció el mal tiempo continuaba, el fuerte viento se cebaba en la superficie de la mar creando formas parecidas a profundos golpes de gubia. Las cadenas de los demás barcos se mostraban tensas y éstos presentaban una ligera escora a la entrada de las rachas más fuertes. Todo está en orden, hemos pasado las primeras horas de este temporal de viento con relativo confort y según los partes meteorológicos aún quedan un par de jornadas antes de que todo vuelva a la normalidad. Ahora toca desayunar.
29º
28 DE ENERO 2016
PLANES Y AUTORIDADES
Sopló de lo lindo ¡si señor! y además muchas horas seguidas mientras se iba debilitando el anticiclón chino. Y nosotros pendientes de los partes meteorológicos para poder pronosticar cuando pasaría este periodo de mal tiempo. Hoy por la tarde botamos el dinghy y nos fuimos hasta las instalaciones de un pequeño club náutico que está próximo a nuestro punto de fondeo a tomarnos unas cervezas. Soplaba entre 20 y 25 nudos pero nos dio igual, piano piano, los dos sentados bastante a popa para que la proa se elevase y nos protegiese de las olas. Llegamos el buenas condiciones y accedimos al club donde había otras tripulaciones. Con los barcos a la vista, compartimos y comentamos entre todos la situación y cada uno expuso su plan de viaje. Unos se van para el norte y otros "bajamos" para el sur. Para mañana dan una notable mejoría y aprovecharemos para ir a Chalong Bay a realizar ante las autoridades los trámites de salida de Tailandia y así, si las condiciones se mantienen buenas, zarparemos hacia Malasia, concretamente a la gran isla de Langkawi. Iremos parando por el trayecto, y si nos apetece, pasando unos días en puntos determinados. Las autoridades malayas son muy flexibles en cuanto al tiempo de travesía y en ningún caso ponen problemas si tardamos dos semanas en llegar. En este tema, las autoridades tailandesas son más tiquismiquis y hay que andar con mucho cuidado con ellas para que no te cojan en un "renuncio". Suponemos que esta situación se deriva por la cantidad de barcos extranjeros que hay en Tailandia y su celo por controlar todos los movimientos (recordemos que Tailandia está gobernada en la actualidad por un régimen militar). De una u otra manera siempre hay que ir con una amplia sonrisa en el rostro y jamás intentar hacer valer criterios, que por muy lógicos que sean, pudieran entenderse como un intento de imponer la "superioridad" occidental.
30º
29 DE ENERO 2016
RUMBO AL SUR
Con la documentación lista y los trámites de salida del país cumplimentados (Inmigración, Capitanía de Puertos y Aduanas) esperamos a zarpar a primera hora del día siguiente. Un agradable y beneficioso viento del ENE de entre 15 y 18 nudos hincharía nuestras velas consiguiendo 6,5 nudos con una ceñida abierta y sin ningún esfuerzo. La verdad es que el Tin Tin se come literalmente la mar cuando el rumbo es de bolina y el viento nos aborda como mínimo por los 45º respecto a la roda. Escogimos cuidadosamente la superficie que queríamos mantener expuesta y posteriormente la trimamos correctamente atendiendo principalmente al piloto automático, el cual nos indica la mejor regulación cuando éste apenas trabaja. El sol bajo y en la proa, nos obligó a mantener una sufrida vigilancia para evitar encontrarnos con alguna boya de pesca. El día amanecía espectacular, a babor iban quedando diferentes pequeñas islas que se recortaban sobre el brillo de la mar. A estribor un Mar de Andaman que mostraba su mejor cara después de varios días de fuertes vientos. La travesía estaba siendo magnífica, un rumbo perfecto en una mar ideal, hasta que llegó el medio día y a partir de ahí el viento fue amainando y alargándose. Para entonces ya habíamos cubierto algo más de la mitad de una travesía de 53 millas que nos llevaría a la parte sur de la isla de Ko Lanta. Fuimos trimando las velas a medida que el viento iba rolando con el fin de sacarle el mayor partido posible a una situación cambiante. Como casi siempre, por la popa nos acompaña en esta ocasión un pez articulado hiper-realista y un pulpito de color crema. Avistamos varios grupos de aves marinas haciendo picados sobre la mar en lo que suponíamos era su desayuno, pero por más cerca que pasábamos del lugar, no hubo ni una picada. Cambiamos varias veces los señuelos mostrando otros aspectos y colores, aumentamos y disminuimos la distancia de los aparejos y hasta llegamos a jugar con el lastre de los mismos, pero nada. Con un calado máximo de 60 metros y dentro de la plataforma continental, pocos pelágicos íbamos a encontrar y los que hubiere o hubiese habido (permítasenos conjugar un pluscuamperfecto para disfrutar por unos breves momentos de nuestro complejo y rico idioma) hace tiempo que serían historia como consecuencia de la intensa presión a la que someten estas aguas todo tipo de pesquerías. Recalamos en Ko Lanta sur en calma absoluta y con un calor agobiante. Largamos el hierro en 07º29,55'N/099º04,39'E sobre siete metros de agua, con fondo de arena ¡e inmediatamente! nos dimos un placentero baño en sus más que cálidas aguas.
31º
31 DE ENERO 2016
ESTRELLAS, FRUTAS Y TROZOS DE CEFALÓPODO
La tarde y la noche transcurrió placenteramente. Un cielo completamente estrellado nos invitaba a volver a buscar al cometa Catalina, pero para estas fecha debería estar cerca de la Polar y ésta, para nosotros, se sitúa sobre los nueve grados de altura sobre el horizonte (siempre hay una relación directa con la latitud del observador) y con esa elevación los astros se ven con dificultad al estar muy filtrados por una atmósfera con mucha humedad. En esta ocasión nos conformamos con las estrellas importantes que corresponden a parte sur de la esfera celeste volviendo a recordar sus enfilaciones, posiciones y nombres. Al día siguiente nos fuimos a tierra. En los alrededores de la playa se ubican varios resorts, algunos de lujo, con suntuosas construcciones e instalaciones. Una vez que se accede a la carretera general, la población se extiende solo unos cientos de metros para cada lado con varios restaurantes. Dimos una vuelta por el lugar y localizamos en un muy humilde establecimiento uno de nuestros principales anhelos ¡frutas y hortalizas frescas! Compramos dos kilos de tomates, dos kilos de pepinos, dos kilos de plátanos y dos kilos de mangos y con tan excelente botín regresamos felices a bordo del Tin Tin. Productos frescos de primera calidad que se valoran mucho cuando no están siempre a nuestra disposición...¡esas pequeñas cosas! Desde el Tin Tin observamos como un elefante recorrió la playa llevando sobre sus lomos a una pareja de recién casados. También vimos como un grupo de peces se alborotaba de manera estruendosa al ser atacados por alguno de sus depredadores naturales. Por la noche pescamos un pargo con anzuelo poniendo de cebo un trozo de pulpo congelado. Posteriormente, y como si sus compañeros hubiesen aprendido la lección, tuvimos cientos de picadas más ¡pero ningún otro individuo se volvió a topar con la punta afilada del anzuelo que escondíamos en el interior de los trozos del cefalópodo!
32º
02 DE FEBRERO 2016
BOYAS Y NIDOS DE GOLONDRINAS
A la mañana, muy temprano, soplaba un monzón de veinte nudos. Rápidamente estibamos el ancla a bordo y dimos rumbo al sur con un conocido destino: la isla de Phetra. Desenrollamos las velas y el Tin Tin aceleró rápidamente hasta alcanzar los seis nudos, velocidad más que suficiente para cumplir con el plan de navegación previsto. A las pocas millas dejamos por babor la bella isla de Ko Ngai donde observamos que dos veleros estaban fondeados frente a una playa situada al SW de la misma. Con los prismáticos escudriñamos el entorno e incluso nos cuestionamos parar, pero al final decidimos continuar para Phetra. Tiempo después dejamos también por babor la isla de Ko Kradan enmarcada en un espectacular paisaje con Ko Muk al fondo. Algunas millas más adelante dejamos por babor un peligroso bajo que sólo despunta a bajamar situado en 07º15,09'N/099º17,59'E. Después de pasar la isla de Ko Talibong dejándola también por babor, nos metimos de lleno en un área infestada de aparejos de pesca, hasta el punto que tuvimos que sacar fuera de servicio el piloto automático y gobernar a mano para ir esquivando las boyas señalizadoras con sus respectivos cabos ¡Impresionante! millas y millas con balizamiento de todo tipo: pequeños bloques de forespán con bambús y banderas de colores, o negras, o blancas, varias botellas transparentes con bambú y bandera, marcas simples de forespán, varias botellas trasparentes unidas en grupo, garrafas de aceite gris, garrafas de aceite amarillas... y el Tin Tin haciendo slalom entre ellas procurando pasarlas por sotavento para evitar los cabos demasiado largos. Poco a poco nos fuimos acercando a las islas Ko Liang Nua y Ko Liang Tai, dos impresionantes moles de piedra caliza con muchas oquedades donde anidan miles de golondrinas. Pero claro, el ser humano también depreda el lugar quitándoles los nidos a las ingenuas aves y vendiéndolos al mercado chino a un precio que supera el valor del oro. Por ello los derroteros avisan a los navegantes de que no es apropiado desembarcar en estas islas ya que las patrullan grupos de "expoliadores" armados, tal es el valor de los nidos de golondrina en el mercado internacional. Y lo más deleznable de todo es que los nidos que están coloreados de rojo son los más apreciados y caros. Esta coloración se da como consecuencia del exceso de salivación que las golondrinas deben de realizar construyendo una y otra vez sus nidos. A veces, cuando uno piensa y reflexiona sobre todas estas cosas, reniega hasta de su propia especie. Posteriormente nos fuimos acercando a la espectacular isla de Phetra, posiblemente uno de los lugares más bonitos y sublimes en los que hallamos estado. Largamos el ancla en once metros sobre un buen tenedero y quedamos inmovilizados en 07º02,08'N/099º28,21'E con cuarenta metros de cadena filada.
33º
03 DE FEBRERO 2016
FONDEADOS EN LA ISLA DE KO TARUTAO
Un atardecer espectacular fondeados bajo la muralla imponente de la isla de Phetra y una noche placentera protegidos en sus aguas calmas. El sol tardó al menos tres horas en superar la altura de la isla hasta iluminarnos directamente y prácticamente a la vez zarpábamos en dirección a la isla de Tarutao. Navegamos entre islotes muy bellos, casi verticales y con una vegetación equilibrista. La mar plana con diez nudos de viento aparente, las velas completamente dadas y el motor a 1500 revoluciones para conseguir una media superior a los cinco nudos. A intervalos debimos ir sorteando las boyas de los aparejos de pesca actuando sobre el piloto automático. Cuando llevábamos media travesía, dejamos por babor la isla de Ko Bulon Le pasando entre ésta y la pequeña Ko Rang Nok con una corriente favorable de 0,8 nudos. Entre la neblina, producida por la evaporación de la mar con tan altas temperaturas, vislumbramos la parte norte de Ko Tarutao, una gran isla que forma parte de un parque nacional y que se encuentra completamente poblada de una densa foresta. En la parte NW hay una extensa playa de arenas blancas la cual era nuestro destino. Cuando arribamos al lugar todo estaba en calma. Intentamos fondear por primera vez en seis metros de calado, pero el ancla no consiguió clavarse y tras varios minutos arrastrando el aparejo marcha atrás por un fondo, posiblemente de arena muy compacta y algas, decidimos alar de nuevo e intentarlo en otro lugar. Con ocho metros de calado y un poco más al sur, conseguimos inmovilizarnos adecuadamente en posición 06º41,77'N/099º38,38'E.
34º
06 DE FEBRERO 2016
FONDEADOS EN KO ADANG
Tras un par de días disfrutando de un paraje espectacular, decidimos arrumbar más hacia el sur, concretamente a las islas que corresponden al grupo Butang. La mar se presentaba rizada con viento del NE lo que significaba que tendríamos un rumbo prácticamente en popa cerrada. Con el fin de aprovechar el viento, atangonamos el génova y éste produjo una propulsión de 5,5 nudos, velocidad suficiente para la travesía. A medida que nos fuimos alejando de costa la mar fue aumentando llegando a una marejada bastante inconfortable que barajamos de la mejor manera. Lejos y por babor dejamos Ko Tanga, la isla principal de un pequeño grupo donde el derrotero de la zona marca un fondeo, pero que para nuestro gusto está demasiado expuesto a los elementos. Accedimos al grupo Butang por el pase del norte, un estrecho donde la mar empeoró, pero la ausencia de corrientes en ese preciso momento, facilitó la entrada sin ningún problema. Nuestro destino era la isla de Ko Adang, y a socaire del viento predominante, largamos el hierro en 06º31,50'N/099º16.96'E sobre 20 metros de agua y filando 60 metros de cadena.
35º
08 DE FEBRERO 2016
PECES DE COLORES
Nos situamos en Ko Adang que pertenece a Tailandia y a escasas 35 millas de Langkawi (Malasia). Al estar bastante alejados de la costa continental, aquí las aguas son muy claras y lo pudimos comprobar mientras ayer arriábamos el ancla en la maniobra de fondeo. Al menos hay quince metros de buena visibilidad. Por ello, hoy por la mañana preparamos los equipos de buceo y nos dirigimos al arrecife sumergido que se sitúa entre el Tin Tin y la playa. Fondeamos el dinghy en una mancha de arena y una vez en el agua un maravilloso espectáculo se abrió ante nuestros ojos. Un mundo sorprendente con formaciones coralinas de todas las formas posibles y multitud de peces de colores nos daban la bienvenida y alimentaban la sensación de encontrarnos en el interior de un acuario preparado exproceso. No sabíamos a que atender primero con nuestros objetivos: a las anémonas repletas de peces payaso, a los cirujanos de las más variados colores, a los peces mariposa que asomaban por una grieta, a los peces sargento que se reagrupaban tras un coral en forma de cerebro, a los peces ángel que transitaban más al fondo entre bellos corales de cuerno de arce, a las variadas especies de pargos que nos observaban desde la distancia y en aguas más profundas, a los muchos salmonetes que revolvían la arena en busca de pequeños crustáceos, a las miles de otras especies que no tenemos ni idea que como se llaman... todo un espectáculo que requirió cientos de inmersiones hasta que agotamos las baterías de las cámaras. Volvimos para el Tin Tin ilusionados por la experiencia y con tremendas ganas de descargar las fotografías y vídeos en los ordenadores con el fin de comprobar los resultados.
36º
09 DE FEBRERO 2016
UN PEZ ESPADA SALTANDO A NUESTRA POPA
Pues no es ninguna exageración ni fruto de nuestra imaginación. Nos encontrábamos tumbados muy ricamente a la sombra del bimini y dulcemente mecidos por el Tin Tin, cuando de repente sentimos como si hubieran tirado al agua una gran roca. La sorpresa hizo que rápidamente nos pusiéramos en alerta y mirásemos al unísono en la misma dirección. De forma repetida y al menos durante un minuto, un hermoso pez espada de dos metros de envergadura saltaba fuera del agua y se dejaba caer de costado creando un gran estruendo ¡a no más de cincuenta metros de nuestra posición! El pez ejecutó la maniobra muchas veces seguidas describiendo una circunferencia perfecta hasta que de repente se restableció la calma. Tan anonadados quedamos que ni se nos ocurrió coger una de las cámaras y dejar constancia de tan espectacular e inusual espectáculo, pensando, claro está, que cada salto sería el último. Creemos que la maniobra que protagonizó el pez espada fue con la intención de reagrupar o aturdir a un grupo de peces pequeños o calamares con el fin de atacarlos posteriormente. Nunca habíamos visto nada igual y menos fondeados al lado de la costa. Sólo en una ocasión, cruzando desde Ecuador hacia la Polinesia Francesa, nos picó un tremendo pez espada el cual rápidamente se puso a dar saltos fuera del agua hasta que nos sacó en un instante cien metros de hilo de dracon del carrete antes de que cortásemos voluntariamente la línea ya que era muy capaz de acabarnos con los 500 metros de reserva en segundos. Si fuéramos unos inocentes, ingenuos y optimistas nautas respecto al devenir histórico que relaciona la naturaleza y el hombre, este espectáculo que hemos vivido en la isla de Ko Adang podría llenarnos de ilusión y esperanza en la capacidad que tenga el medio natural para recuperarse de tanta presión pesquera. Pero nuestra razón y criterio nos incita a pensar que un pez espada, dando saltos por aguas costeras e intentando alimentarse, pudiera significar que ha tenido que cambiar radicalmente de hábitat y hábitos al carecer del suficiente sustento en las aguas profundas y alejadas del litoral donde se desenvuelven habitualmente estos magníficos animales. Ojalá haya sido simplemente una curiosidad dentro del anecdotario marino, pero con tantos cambios naturales auspiciados sin duda por el ser humano, nos ponemos en lo peor.
37º
09 DE FEBRERO 2016
VIENTO, CORRIENTES Y FONDEO
Al parecer el anticiclón chino vuelve hacer de las suyas y nos va a obsequiar para los próximos días un nuevo periodo de fuertes vientos que ya han empezado a dejarse sentir. Por la mañana estuvimos buceando tranquilamente por el arrecife, pero por la tarde empezaron a entrar por el pase norte fuertes rachas de viento acompañadas por una mar de fondo desagradable. Todo ello coincidió con el cambio de la marea, la cual cuando está subiendo la corriente corre hacia el sur y cuando está bajando deriva hacia el norte. La cuestión es que la corriente nos ponía popa/aleta/través al viento y mar de fondo y la situación, por un periodo de unas dos horas, se tornó bastante incómoda. Posteriormente la corriente cambió y se alineó con el resto de los elementos llegando una paz y sosiego relativos. Más tarde, ya de noche, el viento roló estableciéndose del NE y arreciando, tal y como indicaban los partes meteorológicos. Afortunadamente la rolada del viento hizo que quedásemos completamente a sotavento amparados por la costa y poco a poco fue disminuyendo la mar de fondo hasta desaparecer del todo. Mantuvimos sesenta metros de cadena filada para los veinte metros de calado (tres veces el calado) ya que cuando realizamos la maniobra de fondeo, templamos duramente el aparejo hacia atrás con la ayuda del motor para asegurarnos de que el ancla se clavaba profundamente en la arena. Por otro lado, veinte metros de calado significa que tenemos suspendido un peso muerto de cadena de 48 kilos (2,39 kilos/metro x 20) a lo que hay que sumar cuarenta metros más de cadena que están extendidos por el fondo. En estas condiciones, para que desaparezca la catenaria (curva que describe el conjunto de la cadena desde el ancla hasta la roldana en la proa del barco) y pudiera peligrar entonces el agarre al fondo del ancla (CQR de 30 kilos), el viento debería superar los veintitrés nudos según los cálculos realizados específicamente para el Tin Tin (cálculos complejos que entre otros muchos parámetros tiene en cuenta el volumen de la obra muerta y su resistencia al viento). Por otro lado la calidad del tenedero (fondo) es excelente y éste conforma una extensa plataforma de igual calado hacia un sotavento libre de obstáculos. Las ráfagas más fuertes de viento rondaban los veinticinco nudos lo cual suponía estar en el límite de los cálculos teóricos, por ello pusimos en servicio el GPS en modo "fondeo" para que nos avisase si había garreada (desplazamiento por falta de agarre del ancla). Disponemos de 110 metros de cadena y pudimos haber filado muchos más, pero las condiciones eran óptimas (sin obstáculos hacia sotavento) y preferimos mantenernos en las condiciones iniciales a ver que pasaba. Fueron muchas horas de ráfagas moderadas habiendo registrado un máximo de veintisiete nudos y el Tin Tin se mantuvo firme en su sitio.
38º
10 DE FEBRERO 2016
KO LIPE, EN LA FRONTERA CON MALASIA
Después de tres de días de viento y confortablemente fondeados a sotavento de la isla de Ko Adang, decidimos cambiar el fondeo a la parte norte de Ko Lipe, la isla más al sur del grupo Butang. Esta isla reagrupa a gran parte del turismo que entra en Tailandia proveniente de Langkawi (Malasia) y dispone de todos los servicios, aunque éstos son más sencillos y de menor calidad que en otros puntos. Cuando doblamos la punta sur de Ko Adang, recibimos el fuerte viento que acanalaba entre las dos islas, pero con los prismáticos observamos que cercanos a la costa norte de Ko Lipe la mar estaba sólo rizada. En el lugar estaban fondeados varios veleros a resguardo del viento y ¡con señal de Internet! Buscamos un lugar donde estar libres de todo compromiso y largamos el ancla en 06º29,59'N/099º17,60'E sobre veintiún metros de agua con buen tenedero, filando sesenta metros de cadena. Una vez terminada la maniobra, aprovechamos para conectarnos a Internet, ponernos al día con el correo electrónico (no es fácil con tantos amigos y seguidores...) y preparar para actualizar el blog principal con un nuevo reportaje fotográfico comentado. Estaremos por aquí hasta que tengamos un pronóstico meteorológico bueno para salir hacia Langkawi (Malasia).
39º
11 DE FEBRERO 2016
ACTUALIZACIÓN DEL BLOG PRINCIPAL
Aprovechando la excelente señal de Internet que captamos a través de las antenas de telefonía instaladas en la isla de Ko Lipe, hemos subido al blog principal velerotintin.blogspot.com un nuevo reportaje fotográfico comentado con el título: 74.- NAVEGANDO POR LA COSTA OCCIDENTAL DE TAILANDIA. Como siempre deseamos que os guste y esperamos vuestros comentarios, los cuales los podéis hacer en el propio reportaje, en la presente crónica o simplemente escribiéndonos un E-mail. En breve cruzaremos para Langkawi y entraremos de nuevo en Malasia. A través de estas crónicas os seguiremos relatando el día a día de nuestro periplo, y cuando volvamos a tener buena cobertura de Internet, actualizaremos el blog principal con nuevos reportajes.
40º
14 DE FEBRERO 2016
ARRIBADA A LANGKAWI, MALASIA
Definitivamente debíamos salir hacia el medio día que era cuando el viento bajada de intensidad y rolaba al sur. Así que doblamos la punta oeste de Ko Lipe y arrumbamos a Langkawi. Por la proa solamente 30 millas nos separaban de Malasia, pero siendo un pase bastante conflictivo, debíamos tener una buena programación si no queríamos tener una travesía con viento y olas en la roda difíciles de manejar. El día fabuloso a diferencia de la noche donde una tormenta con un espectacular aparato eléctrico nos acongojaba situándose al SW, donde se encuentra la parte norte de la gran isla de Sumatra (Indonesia). Afortunadamente se mantuvo alejada y todo quedó en un espectáculo magnífico. La travesía transcurrió como teníamos previsto. Un viento de quince nudos del SSW estuvo presente durante todo el trayecto y la mar sólo presentó una ola perfectamente manejable. A medida que fuimos entrando al socaire de Langkawi la mar se fue calmando aún más y al mismo tiempo se fue cubriendo con nubes de desarrollo vertical hasta el punto de poder observar por el horizonte la cortina de lluvia de dos fuertes chubascos. Poco después acondicionamos al Tin Tin para hacer frente a uno de ellos que parecía acercarse peligrosamente, pero apenas nos rozó. Cambiamos la bandera de cortesía de Tailandia por la de Malasia y bajo ésta última colocamos la bandera amarilla (Q) que significa que entramos en el país sin ninguna enfermedad infecto/contagiosa y que pedimos libre plática. Doblamos la punta NW de la isla y en breve arribamos a la ensenada fondeando frente a la entrada al puerto deportivo de Telaga. Largamos el hierro en 06º21,55'N/099º40,69'E sobre seis metros de agua filando treinta metros de cadena. La tarde estaba avanzada, el crepúsculo a punto de comenzar y por lo tanto los trámites oficiales de entrada en Malasia esperarían hasta el día siguiente.
41º
16 DE FEBRERO 2016
AUTORIDADES Y ABASTECIMIENTO
Por la mañana madrugamos (siempre madrugamos), botamos el auxiliar y nos fuimos a tierra. Navegamos por el canal de acceso al puerto deportivo y en ese preciso momento el reloj de la torre principal de Telaga empezó a emitir una bonita melodía arabesca seguida de las ocho campanadas que correspondían a esa hora. En Tailandia tenemos séis horas de diferencia respecto a España, pero aquí, en Malasia son siete horas. Desayunamos en un pequeño restaurante y notamos rápidamente que la inmensa mayoría de la gente son musulmanes, sobre todo por el atuendo más representativo que usan las mujeres para taparse la cabeza (en Tailandia la mayoría de la población es budista, aunque hay importantes colectivos de musulmanes e hinduistas). Ya comentamos en otras ocasiones que Malasia siempre nos ha sorprendido por su alto nivel de educación y simpatía, por la falta de dogmatismos radicales y sobre todo porque es un país muy moderno y tecnificado. Una hora después accedimos a un lujoso edificio donde se encuentran los tres estamentos oficiales ante los cuales debíamos realizar la entrada en el país. En un primer momento nos presentamos ante las autoridades de Inmigración donde sellaron nuestros pasaportes después de cumplimentar el formulario pertinente y pasar los dedos índices por un detector de huellas. A continuación pasamos a la Autoridad Portuaria donde gestionamos la documentación del Tin Tin y por último realizamos las mismas gestiones ante Aduanas. Todos los trámites duraron menos de quince minutos, las autoridades de malasia son extraordinariamente eficientes y a su cometido le añaden un plus de amabilidad insuperable. Malasia cuenta con leyes muy estrictas que se deben de conocer y acatar, y siempre que se esté dentro de la legalidad, nunca se tiene ningún problema, pero fuera de ésta...¡pudieran ser temibles! Este sistema, que afecta directamente a la seguridad, nos parece bien y siempre estuvimos muy cómodos y satisfechos de como nos han tratado a todos los niveles en este país. Con la documentación en regla, tomamos un taxi que nos llevó a otra población cercana donde pudimos comprar una nueva tarjeta sim con ocho gigas para acceder a Internet y también hicimos una importante compra en un supermercado. La isla de Langkawi está plenamente abastecida (al igual que el resto de Malasia y Tailandia) pero aquí los precios son especialmente bajos puesto que esta isla goza de un régimen especial duty free (libre de impuestos). Cargados hasta los topes de alimentos y bebidas, retornamos para Telaga y a bordo del dinghy navegamos hasta el fondeo donde nos esperaba en Tin Tin.
42º
18 DE FEBRERO 2016
TURISMO Y CALAMAREROS
Después de dos días fondeados frente a la marina de Telaga, decidimos movernos un poco más al sur y largar el ancla frente a la gran playa de Pantai Tengah, concretamente en posición 06º16,56'N/099º43,59'E sobre siete metros de agua y con un tenedero excelente de arena floja donde filamos cuarenta metros de cadena. La gran playa está dividida en tres partes cuando repunta la pleamar, pero en cualquier otro momento está comunicada. En toda ella hay pequeños hoteles y restaurantes que dan directamente a la arena, pero a este panorama turístico, debemos de comentar que la situación está bastante tranquila ya que la gente (la mayoría ciudadanos rusos y australianos) que disfrutan en este momento del paraje, son personas mayores y en pareja, alejados en sus hábitos (al menos diurnos) de estridentes músicas o actividades ruidosas. Respecto a los turistas que están de paso por el lugar, son en su gran mayoría de origen chino, y a estos si les gustan las motos acuáticas y el parasailing. Quién haya reconocido nuestra posición en una carta náutica, observará que hemos fondeado al sur de la playa, entre ésta y la isla de Tepor con el fin de estar lo suficientemente alejados de las actividades clásicas de las playas turísticas. Cuando se hizo de noche quedamos sorprendidos de la cantidad de embarcaciones menores que encendían sus luminarias con el fin de dedicarse a la pesca del calamar. Usan luces de gran intensidad (alimentadas por pequeños generadores de gasolina) con el fin de atraer a pequeños peces que se "refugian" dentro del haz de luz. Estos peces suponen una gran atracción para los calamares y cuando éstos se concentran bajo la embarcación, a la "sombra", con el fin de ir capturando los peces con pequeñas y fugaces escaramuzas, es cuando los pescadores los intentan capturar con señuelos llamados "poteras". Esta concentración de embarcaciones también se da en Tailandia, pero allí las lanchas son más grandes, mejor equipadas y faenan mucho más lejos de costa pasando varios días en la mar. Por el contrario las embarcaciones que se dedican al calamar en esta zona de Malasia, son pequeñas y elementalmente equipadas pudiendo decir sin miedo a equivocarnos que la inmensa mayoría son de carácter familiar. No es raro ver a un hombre y a una mujer a bordo. Con detenimiento contamos las embarcaciones que rodeaban nuestra posición, entre otras cosas para documentar esta crónica, con el resultado de ¡85 lanchas! En la lejanía, hacia el norte se observaban otro enorme grupo de ellas que correspondían a la zona de Telaga. Suponemos que este fenómeno calamarero se da en estas fechas coincidiendo con la arribada de los perseguidos cefalópodos, aunque no sería de extrañar que mantuvieran la presión pesquera durante todo el año. Desde nuestro zarpe el día 1 de enero, hemos estado observando calamareros por todos los sitios ¿cuanto dura la temporada?
43º
18 DE FEBRERO 2016
PAZ Y A SOCAIRE
Un par de días rodeados de movimiento, embarcaciones que vienen y van, gente por las playas, aeronaves que aterrizan y despegan del aeropuerto cercano, restaurantes, calles con gente y tráfico, pero también supermercados y fruterías. Por el momento ya hemos llegado a cierto nivel de saturación y deseamos paz y tranquilidad. Con un pronóstico de viento de componente este de entre quince a veinte nudos, zarpamos hacia la parte sur de Langkawi, concretamente a Pulau Singa Besar, una hermosísima isla tapizada por una vegetación frondosa y muy tupida. Por el trayecto recibimos de vez en cuando alguna racha fuerte de viento que se precipitaba por las inclinadas laderas o por los estrechos pasos entre islas. Cuando alcanzamos la punta más meridional de Ketapan, observamos con los prismáticos hacia el NE con el fin de determinar si el área de destino gozaba de la suficiente protección del viento y la mar de fondo. Pensábamos que éste vendría rolado ligeramente al norte y el lugar de fondeo estaría a socaire, pero nos confundimos, el viento era completamente del este y entraba en toda la ensenada. Así que tomamos la decisión de retroceder hasta la isla de Pulau Intan Besar y fondear en un área protegida del viento por tres islas, aunque, como poco después pudimos comprobar, el lugar estaba afectado por fuertes corrientes de marea. Largamos el hierro en once metros de agua y quedamos inmovilizados tras filar cuarenta metros de cadena. Estamos completamente solos a excepción de tres pequeños pesqueros que se mantienen al abrigo hasta que amaine el viento. La posición es: 06º14,42'N/099º43,09'E.
44º
21 DE FEBRERO 2016
PAISAJE Y SOMBRAS
Hemos estado unos días muy relajados. A nuestro barlovento se encuentra la pequeña bahía de la isla que nos da cobijo con una costa agreste y repleta de foresta que llega hasta la mismísima orilla del mar. A menudo se escuchan graznidos de aves desconocidas y en los crepúsculos la algarabía producida por varias familias de monos. También se ven de vez en cuando a varias águilas pescadoras de cabeza blanca merodear por el lugar en busca de sustento. Al NW de la posición tenemos otra pequeña isla que cuenta con una bonita playa de arena blanca donde todos los días por la tarde, cuando más aprieta el calor, vamos a zambullirnos en sus cálidas aguas. Posteriormente retornamos para el barco y nos disponemos para disfrutar del ocaso y su crepúsculo vespertino. Las noches pasan confortablemente, a eso de las 21.00 horas suele establecerse un viento de componente este de entre 10 y 15 nudos que inunda el interior del Tin Tin durante toda la noche aportándonos un agradable frescor que ayuda a conciliar el sueño. Por algunas noticias que recibimos de nuestra tierra, Asturias, en estos momentos están pasando por un periodo de crudo invierno y ello aporta pintorescas y emotivas imágenes de pueblos y paisajes nevados que se almacenan en nuestras mentes. También nos acordamos de las heladas y los largos días grises de lluvia, eterna humedad y profunda tristeza paisajística. En contraposición, aquí, vivimos inmersos en la luz y el calor, un contraste que a veces nos resulta demasiado radical. No obstante estamos muy satisfechos de poder aprovechar lo mejor de cada lugar, el buen tiempo monzónico de esta parte del mundo y posteriormente la primavera y el verano del norte de España. En este momento, las horas y los días van pasando, el paisaje que nos rodea envuelve nuestras vidas de naturaleza y sosiego, el agua se mantiene caldeada y deliciosamente acogedora y a bordo del Tin Tin contamos con una atalaya de excepción, eso si, a la sombra.
45º
24 DE FEBRERO 2016
MONOS, AGUILAS, DELFINES Y ESTRELLAS
Nuestra intención de visitar de nuevo la parte sur de Langkawi y disfrutar del más absoluto aislamiento, se está frustrando como consecuencia de la meteorología. Los vientos de componente este han vuelto a ser fuertes, en torno a los veinticinco nudos y por ese área hay poco resguardo. Así que nos estamos contentando con este fondeo donde podemos respirar naturaleza por los cuatro costados. Ayer por la tarde cuando nos fuimos para la playa, como todos los días, conocimos a un nuevo amigo. Éste nos observaba con curiosidad desde lo alto de un árbol y no nos percatamos de ello hasta que con asombrosa agilidad se fue descolgando por las ramas hasta llegar al suelo. Rápidamente esgrimimos nuestras cámaras fotográficas y pensamos que el primate iba a desaparecer al instante, pero no, se quedó sentado sobre la arena con relativa tranquilidad. Obviamente lo fotografiamos mil veces mientras evolucionaba buscando y revolviendo entre la arena y la hojarasca sin perdernos de vista. No vimos a más monos aunque supusimos que el resto de la familia se encontraba expectante en el interior de la foresta. Poco después tres águilas pescadoras evolucionaban ante nosotros planeando sobre las aguas cercanas a la playa y de vez en cuando arañaban con sus garras la superficie en lo que entendimos eran frustrados intentos de pesca. Cuando regresamos al Tin Tin, ya avanzado el crepúsculo, empezamos a escuchar fuertes y armoniosos resoplidos que no podían corresponder a otros mamíferos que no fueran los delfines. Un grupo de ellos se adentraron en la bahía y deambulaban por ella en busca de peces o calamares. Eran de tamaño pequeño y de color gris claro y pasaron muy cerca del Tin Tin pudiéndo verlos con todo lujo de detalle aunque ya entrados en la penumbra de la noche. Y para acabar el día, una hermosa Luna apareció por el este superando la altura de la isla cercana. Muy cerca de ella y manteniéndose, como no pudiera ser de otra manera en la eclíptica, Marte y Júpiter se mostraron esplendorosos pese a la luminiscencia del satélite ¡incluso Sirius! la estrella más brillante de nuestro universo visible, transitó pausadamente durante toda la noche llevada de la mano de la constelación de Orión. Un gran espectáculo que supuso un colofón de lujo a un día lleno de experiencias y comunión con la naturaleza.
46º
25 DE FEBRERO 2016
VIENTO Y NORMATIVAS
Hemos tenido que retornar para Palau Tengah ya que las previsiones meteorológicas no son buenas y necesitamos un lugar de fondeo seguro y confortable. Se anuncian vientos de treinta nudos para las próximas horas, y todo como consecuencia del famoso (por estas latitudes) anticiclón de China. Éste se refuerza llegando a veces a superar los 1060 milibares y como consecuencia, en la periferia, aumenta mucho el gradiente (distancia entre las isobaras) y con ello se incremente notablemente la intensidad del viento. Este año está evolucionando un Niño muy fuerte, lo cual quiere decir que la parte más afectada por las lluvias y el cambio de las corrientes oceánicas es Sudamérica. Por esta parte de Asia debe de mantenerse un clima seco y así esta siendo. Conste que el fenómeno del Niño (y en su momento aunque con menor incidencia, la Niña) afecta a la meteorología de todo el planeta. La cuestión es que el Tin Tin se encuentra en estos momentos fondeado en seis metros de agua con cuarenta metros de cadena y sobre un fondo de arena arcillosa que se engulle literalmente el ancla. En las proximidades tenemos a otros tres veleros más, que suponemos han tomado la misma decisión que nosotros: buscar el lugar de abrigo más confortable. Nuestra intención era visitar la parte sur de Langkawi, pero nos parece que ya no va a ser posible puesto que está próxima nuestra salida de Malasia para retornar de nuevo a Tailandia. Al menos en el grupo de islas que se encuentran al NW de Langkawi (Ko Lipe y Ko Adam) las aguas son transparentes y nos permiten disfrutar satisfactoriamente de más actividades. Navegar hasta Malasia fue como consecuencia de una obligación legal de la normativa tailandesa por la cual una embarcación de recreo extranjera tiene un máximo de un año para permanecer en sus aguas y después debe de abandonar el país. Al entrar con el Tin Tin en Malasia, cuando retornemos a Tailandia en pocos días, volveremos a renovar de nuevo un año de estancia para el barco. Es una pena que en Malasia norte no haya marinas apropiadas con estancias en seco ya que aquí las embarcaciones foráneas no tiene límite de estancia (las personas, en los dos países, tenemos un límite de tres meses, en Malasia de manera natural y en Tailandia si se obtiene un visado con anterioridad, de no ser así solamente se dispone de un mes). Todas estas formalidades, que varían ostensiblemente de un país a otro, son uno de los inconvenientes con los que nos encontramos los transmundistas y sobre cuyas normativas debemos de mantenernos informados para respetar escrupulosamente las regulaciones que dictan en cada lugar. En estos diez años que llevamos navegando, hemos visitado treinta y cinco países y cada uno con sus propias reglas respeto a la estancia de la embarcación y la permanencia en el país de las tripulaciones. Debemos de reconocer que al pertenecer a la Comunidad Europea esta condición nos ha facilitado las gestiones en muchos lugares, pero esa relación siempre depende de como se trate en la CE a los súbditos de estos países. Si se les "aprieta" en Europa, con nosotros hacen lo mismo.
47º
28 DE FEBRERO 2016
TEMPORAL DE VIENTO
Volvimos para Telaga envueltos en un pequeño temporal con vientos que por momentos superaron los treinta nudos. A pesar de estar bastante cerca de tierra, y por lo tanto con un fetch reducido, la ola aumentó sorprendentemente por encima del metro manteniéndose con un periodo muy corto. El Tin Tin ni se inmutó, sólo algunas salpicaduras sobre la cubierta con seis nudos de velocidad sobre una mar casi blanca. Entendimos que esa fuerza del viento tan inusitada era como consecuencia de aceleraciones orográficas ya que las previsiones daban sólo intensidades próximas a los veinte nudos. Cuando llegamos al área de fondeo el viento amainó ligeramente pero seguía duro, por fortuna la mar disminuyó radicalmente asegurándonos cierto confort. Otros tres veleros estaban anclados en el lugar y nos mantuvimos a una distancia prudencial para evitar sorpresas. En seis metros de agua largamos cuarenta y cinco metros de cadena e inmediatamente quedamos inmovilizados al disponer de un fondo mitad arena mitad fango que se engulló el hierro al primer contacto. Así transcurrieron varias horas hasta que en el último momento de la tarde el viento cayó y se restableció la calma. Posteriormente, a partir de las 22.00 horas local, el viento volvió con fuerza para volver a amainar de madrugada. Ya estamos de nuevo listos para dar la salida oficial del Tin Tin de tierras malasias y retornar de nuevo a Tailandia. En las próximas horas visitaremos los estamentos de Inmigración, Aduanas y Autoridad Portuaria para formalizar la documentación y atendiendo a la meteorología zarparemos de nuevo hacia la isla de Ko Lipe situada al NW de nuestra posición.
48º
02 DE MARZO 2016
TRAVESÍA AGOBIANTE
Por la mañana miramos por Internet la última información meteorológica y posteriormente dispusimos todo para zarpar después del desayuno. El anticiclón chino sigue haciendo de las suyas y de momento, durante unos días, seguiremos teniendo vientos frescos del NE. No habíamos doblado el cabo Belua (Langkawi), cuando el viento empezó a arreciar a medida que nos íbamos abriendo de costa. Con una intensidad entre 25 y 30 nudos entrando del través a un largo, decidimos exponer solamente el génova y navegar a la "francesa" de forma confortable dando seis nudos de media con puntas de 7,5. La mar se presentaba con olas próximas a los dos metros y bastante cortas en longitud y periodo. No obstante el Tin Tin sabe barajar esas circunstancias muy bien y se desenvolvía entre ellas con agilidad. Por la proa sólo 30 millas hasta el fondeo de Ko Lipe (Tailandia) pero, independientemente del estado de la mar, el horizonte presentaba múltiples obstáculos ya que la flota de ambos países faenan en estas aguas utilizando el arrastre y el cerco como medios de explotación pesquera. Llevábamos un par de horas de travesía cuando un arrastrero se presenta por estribor y después de una intensa observación determinamos que los rumbos iban a ser coincidentes con riesgo de colisión. Los arrastreros faenan bastante lentos, estimamos que a una velocidad de entre tres y cuatro nudos y el Tin Tin daba en aquel momento seis nudos así que los rumbos y las velocidades de ambas embarcaciones hay que considerarlos como relativos o aparentes. Arreglamos el rumbo y la velocidad con el fin de pasarlo por la popa y a suficiente distancia para librar su red de arrastre teniendo en cuenta que el calado medio de la zona no superaba los 35 metros. Todo iba sobre lo previsto cuando de golpe el arrastrero disminuye drásticamente su velocidad y se dispone a alar el aparejo haciendo virar el almacenador cilíndrico instalado en su popa. Aquella maniobra alteró por completo nuestros cálculos... pero otra circunstancia no valorada hasta entonces acababa de entrar en escena. Otro arrastrero se acercaba a nuestra posición y a rumbo opuesto respecto al primero. Inmediatamente sacamos de servicio el piloto automático, pusimos en marcha el motor propulsor y enrollamos por completo el génova. Intentábamos pasar por la popa al primer arrastrero con lo que nosotros entendíamos una distancia de seguridad suficiente, cuando de repente afloró la relinga de boyas de la red y tuvimos que detener nuestra marcha aproando al viento y quedándonos lo más inmovilizados posible. Mientras tanto el otro arrastrero se cruzaba con el primero y el Tin Tin se quedaba entre los dos aparejos sin disponer de mucha maniobra. Finalmente la proa quedó despejada y pudimos proseguir la travesía. No mucho tiempo después nos dirigíamos hacia un grupo de pesqueros de cerco que evolucionaban frenéticamente intentando localizar los bancos de pesca. No sabíamos muy bien por donde pasar y al final nos decidimos por un rumbo donde parecía haber más espacio entre dos pesqueros. A medida que nos acercábamos observamos que los dos barcos aceleraban bruscamente ¡y largaban sus redes describiendo un amplio círculo! De nuevo otro compromiso para el Tin Tin. Calculamos para donde derivarían las redes como consecuencia del viento y la corriente y alteramos el rumbo para pasar libres de obstáculos. Resultó ser una travesía un poco agobiante que nos recompensó con una arribada al fondeo del norte de Ko Lipe, de nuevo en Tailandia, en circunstancias de calma total. Anclados sobre 21 metros en 06º29,47'N/099º17,60'E y con 60 metros de cadena filada.
49º
04 DE MARZO 2016
NOCHE DE VIENTO
La tarde transcurrió en calma y muy calurosa por falta de viento. El motivo de nuestra arribada a Ko Lipe era el poder conseguir una tarjeta Sim para tener Internet a bordo en aguas tailandesas. Esta isla es turística y cuenta con todos los servicios. En muchos fondeos, y por supuesto en las travesías, no conseguimos acceder a Internet por falta de señal o por ser ésta muy débil, no obstante cuando podemos hacerlo la meteorología tiene la prioridad seguido del correo de la familia, amigos y pedidos/compras de los libros. Estos últimos los remitimos de forma inmediata a Asturias desde donde salen hacia destino en las siguientes veinticuatro horas. Las previsiones continúan dando monzones del NE moderados para la costa oeste donde soplan normalmente por la noche una vez que el calor deja de incidir severamente sobre la tierra del continente y de las islas. Y hoy no podía ser diferente. Tras el ocaso del sol comenzó a soplar una brisa que fue rápidamente intensificándose. Esta dirección coincide con el canal existente entre las islas de Ko Lipe y Ko Adam y por lo tanto era previsible que el viento acelerase más de lo normal. A las 22.00 horas teníamos treinta nudos y una mar de un metro que nos mantuvo en alerta ante la posibilidad de que fuese aumentando. En previsión de lo que estaba por venir, largamos ochenta metros de cadena lo cual supuso unas cuatro veces el calado. El Tin Tin empezó a debatirse con relativa brusquedad alternando las amuras con las rachas más fuertes. La noche se presentó negra aunque plagada de estrellas y algunas luces provenientes de la isla. Por la proa y a estribor también sufrían las mismas circunstancias otros dos veleros y un catamarán. Los bajos existentes en la bocana este del pase y una extensa lengua de arena parecían mitigar las olas y gracias a ello la mar no aumentó más quedándose en una altura media por debajo de 1,5 metros. Estábamos seguros, el fondo tenía buen tenedero y el ancla estaría enterrada hasta la cadena. Con ochenta metros filados asegurábamos una buena catenaria y aún nos quedaban treinta metros más por si fueran necesarios. Pocas veces aguantamos semejante viento y mar fondeados en tanta agua (21 metros) pero en esta zona no queda más remedio, al menos el "holding" es excelente. Hacia la media noche pusimos la alarma de fondeo del GPS y nos fuimos a dormir, éste nos avisaría si nos desplazábamos más de dieciocho metros hacia sotavento. Por más experiencia que se tenga en este campo resulta difícil conciliar el sueño en estas condiciones y uno se mantiene relativamente relajado pero en permanente vigilia pendiente de todos los sonidos que entran en juego cuando el viento y la mar se ponen duros. Sobre las 04.30 horas el viento amainó y se quedó estable entre los veinte y los veinticinco nudos y ese fue el momento de acceder un sueño reparador.
50º
07 DE MARZO 2016
PLAYA Y TOMAS SUBMARINAS
Tras una noche muy movida, a media mañana nos fuimos al centro de la población de Ko Lipe donde conseguimos una tarjeta de acceso a Internet para Tailandia. Comimos por el lugar degustando alguna especialidad tradicional tailandesa y quedando una vez más maravillados de la mezcla de sabores y especias. De vuelta en el Tin Tin preparamos todo para zarpar hacia la cercana isla de Ko Adam ya que no queríamos repetir una noche tan ventosa como la anterior. Buscamos un fondeo agradable y lo más apacible posible y para ello encontramos una pequeña playa delimitada por grandes y espectaculares rocas graníticas. Nos mantuvimos fondeados sobre diecisiete metros de agua en posición: 06º31,72'N/099º16,91'E y filando sesenta metros de cadena. En el lugar nos quedamos tres días disfrutando del paisaje, de la calma y sobre todo de la playa y sus fondos coralinos entre los que grabamos multitud de tomas submarinas. Por las noches el viento hacía acto de presencia puntualmente, un par de horas después de anochecer, iba arreciando hasta los veinticinco nudos y sobre las 04.00 de la madrugada caía hasta el amanecer. Espectaculares ortos y ocasos transitaron durante nuestra estancia rodeados de un cielo totalmente despejado. En breve continuaremos viaje hacia el norte para ir acercándonos de nuevo a la marina de Krabi donde tenemos prevista la entrada para el día 16 del presente mes de marzo.
51º
09 DE MARZO 2016
MAREJADA EN EL PASE NORTE
Cuando abrimos los ojos ya había claridad en el exterior. Con los prismáticos observamos el horizonte más allá del pase norte y pudimos determinar que en el exterior, en mar abierta, el viento seguía soplando aunque éste había rolado al este. Desayunamos tranquilamente, pusimos el Tin Tin a son de mar, arrancamos el motor y veinte minutos después empezamos a recoger la cadena de fondeo. Entraba algo de mar de fondo por el pase y ello nos hizo sospechar que las condiciones aún no eran buenas para zarpar. De todas formas decidimos acercarnos al pase y ver como estaba la situación. A medida que lo hacíamos cada vez nos dábamos cuenta que la mar estaba bastante fuerte, entre otras cosas como consecuencia de la corriente de marea que corría contraria a la dirección del viento dominante. Poco a poco nos fuimos metiendo en el lío tratando de calcular cuantas serían las millas donde se estaba dando una marejada bastante importante. Los senos empezaron a hacerse cada vez más profundos y las olas rompían por todas partes. Teníamos dos opciones, dar la vuelta y esperar a que amainasen las circunstancias o continuar. Por delante teníamos unas cuarenta millas así que decidimos continuar. Puestos a rumbo el viento y la mar entraban muy cerrados por la amura de estribor. Desenrollamos la mitad de la vela mayor y la cazamos muy plana a poco ángulo respecto la crujía, ella nos daría estabilidad de rumbo y ayudaría al piloto a gobernar. El motor a 1850 RPM nos posibilitaba en las encalmadas cinco nudos, aunque cuando nos alcanzaban los trenes de olas apenas llegábamos a los tres nudos. El viento llegó a alcanzar los veintiocho nudos. Encapillamos varias olas después de pasar una serie consecutiva de empinadas crestas y entrar en sincronismo longitudinal. El agua arrollaba por la cubierta mientras en la bañera nos manteníamos secos y confortables. El piloto apenas trabajaba, la vela mayor y su correcta disposición hacia orzar la embarcación y ésta se defendía sin dar en ningún momento un pantocazo, virtud ésta que sólo disponen los veleros con una obra viva tradicional y marinera. Poco a poco el viento fue amainando y con él la mar. Tres horas después navegábamos en ceñida con todas las velas dadas en una mar en franca mejoría. El destino fue la isla de Ko Petra, una parada obligatoria en la ruta hacia el norte con un espectacular paisaje. Escribimos esto sobre once metros de agua y 45 metros de cadena filada, inmovilizados en posición: 07º02,16'N/099º28,25'E.
52º
10 DE MARZO 2016
ACTUALIZACIÓN DEL BLOG PRINCIPAL
Aprovechando una buena cobertura de Internet, hemos subido al blog principal velerotintin.blogspot.com un nuevo reportaje fotográfico comentado con el título: 75.-NAVEGANDO POR LANGKAWI (MALASIA) el cual deseamos que os guste y esperamos vuestros comentarios.
53º
11 DE MARZO 2016
MAL DIA PARA EL FONDEO
A la sombra de Ko Petra desayunamos tranquilamente mientras escuchábamos el silencio de la mañana. Un paredón majestuoso y el Tin Tin fondeado a sus pies en la mayor de las tranquilidades. Antes de que el Sol apareciese sobre la inmensa roca caliza, levamos el aparejo de fondeo y pusimos rumbo al norte. Rápidamente debimos de sortear cantidad de aparejos de pesca, una veces actuando sobre el piloto automático y en otras desactivándolo y maniobrando a mano. El día se presentaba caluroso, apenas una brizna de viento soplaba de cualquier lugar y el Volvo Penta revolucionaba a 1600 RPM obteniendo con ello cinco nudos de promedio. De vez en cuando pasaban cerca del Tin Tin, y a modo de fantasmagóricas figuras, grandes medusas de color parduzco con un diámetro que estimamos entre los treinta y los cuarenta centímetros. En otras ocasiones algún pez aguja salía despedido de las amuras y se alejaba con rápidos y elegantes saltos sobre el agua. Por el horizonte, en la proa, a babor o a estribor se observaban pesqueros de todo tipo: calamareros, arrastreros individuales, arrastreros en pareja, cerqueros, naseros, rederos, palangreros... ¡y la madre que los parió! El destino era Ko Muk una bonita isla donde ya habíamos estado con anterioridad y que tiene, aparte de una playa y el correspondiente hotel, una cueva navegable que da a un recinto natural y amurallado de extraordinaria belleza. Cuando arribamos ya estaban fondeados un catamarán y dos monocascos en el mismo área donde nos indicaba nuestro track anterior. Nos apartamos respetuosamente y largamos el hierro. Una vez filada la cadena una cantidad equivalente a tres veces el calado y aplicada la correspondiente boza de descarga, dimos atrás y pudimos comprobar que el ancla daba botes por el fondo sin conseguir calvarse convenientemente. Al coger con la mano la cadena a la salida de la polea, se podía sentir que el fondo era duro y quizás tuviera algas aunque parecía estar libre de rocas. Tras desplazarse algunas decenas de metros hacia atrás esperando que el hierro entrase en una mancha de arena adecuada, decidimos recoger el aparejo e intentarlo de nuevo en otro lugar. Nos desplazamos hacia estribor unos 50 metros y volvimos a intentarlo. En esta ocasión no había duda, el fondo era rocoso y el ancla revotaba por él como una pelota de tenis. De nuevo arriba con el aparejo y cambio de lugar. En esta ocasión lo intentaríamos más cerca de tierra y tras el catamarán. Arriamos, fondo, filamos cadena, marcha atrás a poca, arraigamos la boza, aceleramos marcha atrás...¡piedra! ¿qué hacemos? Estaba claro, la única mancha de arena estaba ocupada por los veleros y el catamarán ¡Aparejo arriba! ¡oh! ¡no! ¡el ancla está encepada! ¡maldita sea! Viramos a estribor, a babor, avante... ¡libre! ¡uff! Una vez estuvo sobre la roldana, dimos gas sin pensarlo dos veces y nos alejamos de Ko Muk para no volver, quizás, nunca más ¡que pesadilla! La proa la dirigimos a la parte sur de la isla de Ko Lanta de donde nos separaban quince millas. Arribamos sin problemas entrada ya la tarde, fondeamos a la primera en siete metros de agua y filamos cuarenta metros de cadena ¡que alivio! ¡por fin arena! escalera de baño arriada y los bodys al agua... ¡vaya día!
54º
15 DE MARZO 2016
MONZONES Y VIRAZONES
Estuvimos un par de días en el fondeo de Ko Lanta sur con mucha tranquilidad y disfrutando de unos ocasos (y sus correspondientes crepúsculos vespertinos) extraordinarios. En tierra hay una pequeña villa donde conseguimos fruta variada y unos pepinos y tomates excelentes. Posteriormente zarpamos para un fondeo situado en Ko Lanta norte en posición: 07º38,06'N/099º01,35'E, un lugar muy abierto y con la costa a barlovento muy baja lo que hace que sea ventoso y desapacible. Pero tuvimos suerte y el día/noche transcurrió apaciblemente. En esta época los monzones del NE ya empiezan a escasear y se da un curioso fenómeno: estos monzones arrecian por la noche y por la mañana, a partir de las 11.00 se queda en calma y sobre las 13.00 empieza a soplar un virazón (vientos térmicos) del W al SW (rolada de 180º) posteriormente siguen soplando hasta las 23.00 horas momento en el que tras una corta quedada, aparecen de nuevo los monzones (otra rolada de 180º). Es lo que toca, pasear la cadena de un lado para el otro. Afortunadamente este año está transcurriendo sin demasiada nubosidad y sus correspondientes tormentas. Todo está muy tranquilo por el momento. El fenómeno del Niño está propiciando que Asia tenga una temporada más seca de lo normal.
55º
15 DE MARZO 2016
FONDEADOS A DOCE MILLAS DE LA MARINA
Bueno, poco a poco esta temporada de navegación va llegando a su fin. Del norte de la isla de Ko Lanta nos dirigimos a las islas que componen el grupo Ko Dam que se sitúan a unas doce millas de la marina de Krabi, destino final para los próximos días. El día amaneció espléndido y a medida que fue amainando el monzón la atmósfera fue adquiriendo un color lechoso como consecuencia de la temperatura reinante (llegamos a los 38º) y la consecuente evaporación del mar. Por estribor fue quedando la isla de Ko Pu donde el año pasado realizamos el último fondeo antes de acceder a las instalaciones portuarias. Pero en esta ocasión elegimos la isla de Ko Dam Khwan para esperar la marea más oportuna que nos facilitará el acceso a la marina de Krabi Boat Lagoon. Fondeamos sobre catorce metros de agua en posición 07º57,66'N/098º48,49'E y filamos cincuenta metros de cadena. El lugar es muy turístico, sobre todo por las mañanas donde no dejan de pasar embarcaciones de todo tipo con miles de turistas ávidos de descubrir los bellos paisajes de esta parte de Tailandia. Por nuestra aparte aprovechamos para pasar un par de días muy relajadamente e ir preparando al Tin Tin para la varada que se producirá en breve. Limpiamos convenientemente la hélice propulsora y la hélice de proa para asegurar el máximo de prestaciones a la hora de hacer las maniobras de atraque. Todo está listo para zarpar mañana con la marea del medio día y entrar una vez más en la marina de Krabi.
56º
17 DE MARZO 2016
ARRIBADA A PUERTO
La pleamar la teníamos para las 15.50 horas (punto de referencia: Ao Nang, Krabi) con 2,50 metros (programa: TideCom) y nos situábamos exactamente a doce millas de la instalación portuaria y a ocho millas del primer waypoint facilitado por la marina. Este waypoint es el primero de seis que indican con exactitud el paso más adecuado por la zona con mayor profundidad. A las 13.30 horas decidimos levar el aparejo de fondeo e ir acercándonos a poca marcha al primer waypoint situado en 07º57,91'N/098º55,20'E. El área está plagada de diferentes bajos que se han formado como consecuencia de la acumulación de sedimentos en la desembocadura de varios ríos y canales. Por ello tener una serie de puntos de referencia actualizados que indiquen con exactitud la ruta más profunda, es de vital importancia. A las 15.00 horas exactamente llegamos al primer punto de referencia y pudimos comprobar que la sonda nos indicaba 1,50 metros de agua bajo la orza ( + 2,20 de calado del Tin Tin da un resultado de 3,70 metros de calado total). En ese punto arrumbamos escrupulosamente hacia el segundo waypoint a una velocidad media de 3,5 nudos, manteniéndose la sonda bajo la orza entre los 2,00 y los 1,50 metros. Entre este segundo punto y el tercero, saltaron todas las alarmas, la sonda bajo la orza disminuyó de 1,00 metros y llegó a indicar 0,80 metros. Estábamos confiados en que habría suficiente agua para pasar, pero cuando la instrumentación indica valores tan bajos es imposible evitar un gran nivel de ansiedad. El viento nos entraba por la popa con unos 15 nudos de media lo que producía olas de pequeña importancia ¡pero olas con sus crestas y senos! siendo estos últimos los que también nos restaban sonda. El tercer waypoint está situado en 07º59,10'N/098º55,90'E y nos dejó en el centro de un canal que está flanqueado por bajos que afloran a bajamar y los cuales se notaban perfectamente al romper sobre ellos la mar. Del tercer punto de referencia al cuarto debimos de virar a estribor. La sonda empezó a aumentar y cuando vimos que indicaba por encima de los 2,00 metros (bajo la orza) respiramos plácidamente. Una vez en el río la sonda llegó a marcar hasta 24 metros de calado. El quinto waypoint localizado en 08º00,10'N/098º57,30'E nos desviaba por el canal norte y nos dirigía por un amplio brazo de agua con un calado medio de 7,00 metros. El sexto punto nos situó frente a un estrecho canal de apenas 15 metros de ancho entre el manglar (08º00,80'N/098º57,40'E) por el que da cierta aprensión transitar por lo cerrado del lugar donde llegamos a sondar entre los 1,50 y los 2,40 metros. Al final una estructura de hormigón indicaba la entrada a la marina. A partir de ahí se abrió ante nosotros un mundo de tranquilidad y relajación. A estribor varios pantalanes con muchos veleros atracados. A babor una alineación exclusiva para catamaranes y al fondo un foso y un extenso espacio destinado a la varada de las embarcaciones. Encontrándonos a unos diez minutos de la entrada, realizamos una llamada por el canal 67 de VHF para notificar nuestra arribada, por ello dos marineros nos esperaban a pie de atraque y otro nos guiaba a bordo de una auxiliar neumática. El atraque se realizó por el costado de estribor con absoluta exactitud y con el auxilio inestimable de la hélice de proa (indispensable para barcos de crucero como el Tin Tin que disponen de orzas profundas y corridas). Los dos marineros de tierra pillaron rápidamente los largos de proa y popa y ellos mismos se encargaron de instalar los spring. Posteriormente nos conectaron al sistema eléctrico y nos facilitaron el enganche de una manguera con agua dulce. Todo un lujo de amabilidad y eficiencia. Al poco tiempo el Volvo Penta se silenció, los extractores de la cámara de máquinas siguieron funcionando unos minutos más, se apuntaron los datos de la electrónica y se desconectaron los instrumentos, se chequeó la sentina, se desconectó la maniobra de las velas, se puso fuera de servicio el cabrestante (que siempre hay que tener listo por si acaso) y pasados unos quince minutos en el Tin Tin reinó el silencio. Tras unos minutos de relax y tras comentar el pasaje, nos fuimos a las oficinas con toda la documentación del barco donde dimos la entrada. Mañana por la mañana un vehículo de la marina nos llevará hasta la ciudad (Krabi) donde daremos la entrada oficial en Tailandia ante los estamentos de Inmigración, Aduanas y Capitanía de Puerto.
57º
18 DE MARZO 2016
PAPELEO, OFICIAL CON ULCERA DE ESTÓMAGO
El Tin Tin está relajado amarrado al pantalán. Se nota que la línea de flotación está más elevada de lo normal como consecuencia de la escasa cantidad de agua que contienen los tanques donde estimamos habrá unos 180 litros disponibles (el Tin Tin cuenta con dos tanques de 500 litros cada uno) y también por la limitada cantidad de combustible que estimamos en 240 litros (a bordo se dispone de otros dos tanques destinados al almacenamiento de diésel con una capacidad de 500 litros cada uno). A las 09.00 nos recogieron en la marina y nos trasladaron hasta la ciudad de Krabi donde accedimos en primer lugar a la oficina de Inmigración. Después de esperar durante treinta minutos por el encargado de las tripulaciones de embarcaciones extranjeras, nos atendió un oficial mal encarado el cual nos incomodó bastante durante todo el procedimiento. Papeles por aquí, papeles por allí, firmas y más firmas, malas caras, malos gestos... hasta que al final de un loco procedimiento lleno de formalismos absurdos, vimos por fin sellados nuestros pasaportes. A continuación nos trasladaron al edificio de Capitanía de Puerto donde los trámites fueron rápidos, sencillos y amistosos. Y por fin nos fuimos hasta Aduanas donde también nos trataron con celeridad y simpatía. No entendimos la actitud del oficial de Inmigración y por ello a la llegada a la marina lo comentamos con los responsables de las instalaciones los cuales nos aseguraron que no éramos la primera tripulación en protestar por el mismo tema, asegurándonos que tomaban buena nota y lo harían valer donde correspondiese. Como en anteriores ocasiones alquilamos un apartamento en la propia marina donde podemos disfrutar de todas las comodidades. Después de un merecido descanso, sobre las 17.00 horas nos fuimos para el Tin Tin con la intención de arriar el génova. A penas había viento y ello facilitó la maniobra, pero el escaso espacio en el pantalán dificultó bastante el correcto plegado de los 70 metros cuadrados de la gran vela de proa. Al final conseguimos realizar el trabajo con precisión y los 50 kilos de vela fueron estibados cuidadosamente en el camarote de proa. Ni la luz diurna ni los mosquitos dieron para más, así que a paso acelerado nos fuimos para el condominio y tras cerrar la puerta disfrutamos de un pequeño oasis de lujo asiático que nos introducirán poco a poco en un nuevo periodo de vida terrícola. Por el ventanal del salón podíamos ver al Tin Tin compartiendo espacio con otros coleguillas de igual condición.
58º
19 DE MARZO 2016
LOS TRABAJOS NECESARIOS DE MANTENIMIENTO
Estos últimos dos días hemos estado enfrascados en realizar los trabajos de mantenimiento que requiere el Tin Tin para una larga estadía sin actividad y en seco. Una vez arriadas las velas, endulzadas y estibadas en el interior, le tocó el turno a las máquinas: motor propulsor, generador y aire acondicionado los cuales son tres equipos que refrigeran con agua de mar. La maniobra fue la misma para los tres: soltamos las admisiones de los sistemas de refrigeración que salen de los filtros de agua de mar y las introducimos en un cubo de veinte litros de capacidad lleno de agua dulce. Posteriormente pusimos en servicio las máquinas (una por una) a la vez que la manguera de agua dulce iba rellenando el cubo. Pasados unos diez minutos se cortó el suministro de agua del exterior y se fue añadiendo (al agua que quedaba en el cubo) líquido refrigerante para aprovechar sus cualidades anti-oxidantes. Por otro lado también puenteamos la producción eléctrica de los paneles solares hacia el distribuidor de carga del motor (cambiamos el conductor del alternador por el de los paneles) con el fin de que éstos mantengan cargados los tres grupos de baterías (de los dos paneles solares uno ha quedado completamente tapado). Organización de la cubierta (endulzado general, retirada de cabos, cubiertas a escotillas y portillos, destemple de la jarcia, retirada de salvavidas, holms, pértiga, etc.), arriado del equipo de fondeo, preparación del auxiliar y fueraborda, tratamiento con vinagre (ácido acético) de los WC, equipos de electrónica portátiles para el horno ("jaula" de Faraday ante tormentas), desconexión de antenas, limpieza de la madera interior con una solución de vinagre, endulzado de la sentina y bombas, aflojado del prensa-estopas, incorporación de deshumectantes químicos... en fin, éstos y otros muchos trabajos de mantenimiento necesarios si queremos que a la vuelta todo esté en orden y no haya grandes sorpresas. Sólo hemos trabajado de 07.30 a 11.00 y de 17.00 a 19.30, el resto del tiempo lo hemos pasado a buen resguardo del intenso calor en el apartamento disfrutando de buena señal de Internet y organizando nuestra estancia en España.
59º
21 DE MARZO 2016
FINAL DE TEMPORADA
Y llegó el momento de dejar al Tin Tin a buen recaudo en la marina de Krabi y emprender nuestro viaje de visita a España. En breve los monzones cambiarán al SW y comenzará la época de lluvias y tormentas. Por ello, después de haber aprovechado la sesión seca en este lugar del mundo para navegar, ahora toca disfrutar de nuestra tierra, familias y amigos. El viaje hasta Asturias ha sido largo y tedioso con más de veinte horas entre vuelos y aeropuertos. Pero por fin ya estamos en casa, acusando las bajas temperaturas que esperamos empiecen a recuperarse con la entrada de la primavera en este maravilloso paraíso. Volvemos a la vida de terrícolas durante un largo periodo de tiempo y aprovechando la estancia en España realizaremos una serie de eventos públicos (conferencias y cursos formativos) de los cuales os iremos informando a través del blog principal. Nada más nos resta que agradeceros vuestro seguimiento por este blog auxiliar y deseamos que estas crónicas os hayan resultado interesantes. Por nuestra parte las hemos realizado con toda la ilusión para manteneros informados del día a día de las singladuras y con ello agradeceros vuestras atenciones y muestras de cariño de estos últimos diez años. Muchas gracias por estar ahí, esperamos poder volver a vernos o conoceros personalmente en algún momento de los próximos meses aprovechando cualquiera de los eventos en los que intervengamos. Un fuerte abrazo para todos. Isabel&Guillermo 
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